Montar en bici es bueno para tu salud (y tu economía): 10 buenos motivos para hacerlo después de los 50

Según varios estudios, desplazarse en bici reduce un 51% el riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares
También ayuda a combatir el estrés, a fortalecer la espalda y a mejorar nuestro sistema inmunológico
El estudio que revela los numerosos beneficios de ir (también) al trabajo en bicicleta
Lo dice la ciencia: montar en bici regularmente “reduce un 47% el riesgo de muerte por cualquier causa” y un "20% las posibilidades de que nos receten fármacos para problemas de salud mental". Los datos se extraen de un estudio publicado en BMJ Public Health, según el cual desplazarse en bici al trabajo o centro de estudios reduce, además, un 51% el riesgo de morir de cáncer y un 50% el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular.
Si estas cifras no te motivan lo suficiente como para sacar del garaje tu vieja bici sigue leyendo, porque si ya peinas canas esta información te interesa: un estudio realizado por la Universidad de Birmingham publicado por The Guardian, asegura que el ciclismo puede ralentizar los efectos del envejecimiento y rejuvenecer el sistema inmunitario. Te damos 10 motivos más para desempolvar tu bicicleta y salir a pedalear con tus hijos:
Oxigena el cerebro y combate el estrés
Montar en bicicleta aumenta tu capacidad aeróbica y pulmonar, y facilita la oxigenación del cerebro, combatiendo el estrés y mejorando tu estado emocional. Además, los estudios demuestran que al pedalear aumentas tu autoestima y liberas hormonas que ayudan a evitar la tristeza y a mejorar el estado de ánimo, como endorfinas y dopamina.
Te ayuda a dormir mejor
Cuando montas en bici reduces los niveles de cortisol, una hormona relacionada con el estrés que impide el sueño profundo y liberas serotonina, que facilita el sueño. Además, según un estudio de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, las personas que practican ciclismo reducen el tiempo que necesitan para quedarse dormidos y aumentan su calidad del sueño.
Fortaleces tu espalda
La musculatura en general se beneficiará de la práctica de este deporte, pero especialmente notarás mejoras en la zona lumbar, al fortalecer sus músculos y estabilizar la columna vertebral, contribuyendo a evitar la aparición de hernias discales.
Corazón fuerte
Según los expertos, si eres constante con las salidas en bici y vas incrementando la intensidad de pedaleo, poco a poco conseguirás elevar tu umbral aeróbico y anaeróbico, haciendo que el corazón bombee la sangre con mucha más fuerza, fortaleciendo el sistema circulatorio y mejorando la frecuencia cardíaca en reposo.
Sistema inmunológico resistente
Cuando practicas este deporte tu cuerpo produce fagocitos, células inmunológicas que atacan las bacterias infecciosas que entran en tu organismo, disminuyendo la posibilidad de caer enfermo.
Articulaciones más sanas
Como podrías sospechar, montar en bici fortalece la musculatura de las piernas y la articulación de las rodillas, pero además el movimiento cíclico del pedaleo favorece la difusión de las sustancias nutritivas por los cartílagos obteniendo articulaciones más sanas, resistentes y protegidas.
Mejora la celulitis
Montar en bici es uno de los ejercicios más eficaces para luchar contra la piel de naranja. La tonificación de la musculatura junto a la acción de masaje sobre nuestra piel que provoca el pedaleo moviliza activamente el agua y toxinas de nuestro organismo, impidiendo la acumulación de grasas al quemarlas para producir energía
Ayuda a controlar tu peso
Según los expertos, el ciclismo es una de las mejores actividades para quemar grasas y por tanto, para reducir el colesterol, una de las primeras causas de enfermedad cardiovascular. Basta con salir una hora al día con la bicicleta para quemar alrededor de 500 kcal y poder permitirnos saltar la dieta de vez en cuando sin notar sus efectos.
Prolongas tu esperanza de vida
Un estudio realizado en Noruega que analizó a un grupo de hombres de entre 70 y 80 años concluyó que, sólo 30 minutos de ejercicio por día dieron como resultado cinco años más de vida, en comparación con aquellos hombres del grupo que no realizaban ninguna actividad física.
Beneficios económicos
El uso de la bici para la vida diaria en detrimento del coche u otros transportes públicos se traduce en un ahorro económico para nuestro bolsillo además de contribuir en la lucha contra la contaminación, sobre todo en las grandes ciudades.