Así funciona la nueva ECU

INFORMATIVOSTELECINCO.COM 18/03/2008 09:53

La misión de la centralita electrónica es controlar toda la mecánica del coche. Así lo explica Alonso respecto a la pasada temporada: "Los ingenieros hacían virguerías con ella. Igual llegabas a la primera curva y hacían que el diferencial fuese de una manera, y en la segunda de otra. Te quitaban el control de tracción en la segunda curva porque no lo necesitabas y en la tercera te ponían mucho. En cada curva podían poner unos reglajes y una electrónica diferentes".

¿Qué cambia el hecho de que todos los monoplazas lleven la misma centralita electrónica este año? Sencillo, el coche carece de ayudas. Ni el diferencial, ni el control de tracción... nada de nada. Es la misma ECU para todos, lo que posibilita que haya algo más de igualdad en la pista, pues los pilotos no dependen tanto de su coche y sí de su destreza al volante.

El uso de una misma centralita por todas las escuderías, es decir, la ausencia de ayudas electrónicas afectará en carrera a los pilotos. Para Alonso, cuando más se notará será en "con neumáticos usados, en el control de tracción. El coche va a patinar muchísimo. Y las salidas, el año pasado todas las salidas eran más o menos iguales para todos. Este año, con salidas manuales puedes ganar muchas posiciones o perderlas también si cometes un error".

Las ECU's, explica el español, "no son manipulables, no tienen nada que manipular por dentro. Incluso están precintadas para que no toques nada, y aunque toques, creo que lo que hay dentro es imposible de cambiar".

McLaren, pionera

La nueva ECU fue ideada por McLaren, y durante la pretemporada despertó los recelos del resto de escuderías por dos motivos: El primero, creían que al haberla fabricado la escudería inglesa, les daría ventaja sobre el resto de escuderías. El segundo, para muchos, la centralita perjudicaba el rendimiento de los monoplazas.

Así, en un principio fue rechazada por equipos como Ferrari, Renault o BMW. Pero lo cierto es que la norma añade emoción a las carreras, como ya se pudo ver en el Gran Premio de Australia.