El decreto energético de Alemania: aprueba bajar la calefacción y apagar edificios públicos

  • En oficinas y edificios públicos se rebajará la temperatura mínima de 20 grados a una máxima de 19 grados y se desconectarán los calentadores de agua en los lavabos

  • Los privados tendrán prohibido calentar sus piscinas

  • El Ministerio de Economía alemán prevé reducir el consumo de gas en aproximadamente un 2% con plan de ahorro energético

El PP ha alborotado contra el decreto energético del Gobierno y Alemania lo calca. Bajada de la calefacción a 19 grados y el apagado de los edificios públicos y la publicidad. El decreto alemán de ahorro energético va más allá e incluye el apagado de monumentos y la prohibición de que calentar las piscinas privadas.

El plan del Gobierno alemán establece una prohibición entre las 22.00 y las 06.00horas de iluminar edificios o monumentos, así como las instalaciones publicitarias luminosas.

En los edificios públicos se dejará de calentar las estancias y espacios no frecuentadas o donde se realicen actividades esporádicas, mientras que en oficinas y otros se rebajará la temperatura mínima de 20 grados a una máxima de 19 grados . Además se desconectarán los calentadores de agua para el lavado de manos.

En los locales comerciales con calefacción, se prohíbe mantener permanentemente abiertas las puertas.

El Gobierno de Olaf Scholz obliga, igualmente a los particulares, que no podrán calentar sus piscinas, mientras que las empresas proveedoras de gas y los propietarios de viviendas deberán informar a sus clientes o inquilinos sobre el consumo de energía previsto y medidas de ahorro.

El ministro de Economía, Robert Habeck, ha subrayado la necesidad de avanzar en "la independencia del suministro energético ruso", ante el temor a que la situación se complique de cara al próximo invierno. Las medidas se aplicarán en principio durante seis meses.

España debate la aprobación del decreto energético con la oposición del PP

El Gobierno lleva al Congreso de los Diputados el plan de ahorro energético, que saldrá adelante gracias al apoyo de sus socios de investidura. Desde el PP, solo se han escuchado críticas a las medidas que van en la línea que ha pedido Bruselas para enfrentar el difícil invierno que se avecina por los recortes del suministro de Rusia.

La primera en mostrar su disconformidad fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que amenazó con desobedecer calando en la dirección central del Partido Popular, desde donde han dejado las manos libres para que cada presidente autonómico pueda recurrir el decreto energético, al que acusan de inconstitucional.