Según informa el diario Daily Mail, Jason Bramley, Steve Hanson y Jonny Biggins están descubriendo que se siente llevando un bebé en la tripa gracias a los ‘vientres de empatía’. Mediante unos trajes con los pechos y la tripa de una mujer embarazada están experimentando todas las incomodidades que esto supone.
Los tres hombres utilizan sus trajes para ir a trabajar, al bar, a la cama… y sólo se lo quitan para lavarlo. Además, están escribiendo sus impresiones en unos diarios.
Steve, de 46 años, afirma que “tareas diarias como ponerse los calcetines se convierten en algo monumental”. Jason, de 44, no entiende cómo “las mujeres embarazadas no van en silla de ruedas”.
El traje está diseñado para ejercer presión sobre la vejiga, el estómago y los pulmones y causar distensión abdominal para ser aún más real. “Siento un enorme respeto por todas ustedes, madres embarazadas”, sentencia Steve.