Hubo achuchones, miraditas de complicidad y hasta manitas con Donald Trump en esta visita de Emmanuel Macron a EEUU. La prensa internacional bromeó sobre la intensidad de la relación del presidente francés con su homólogo estadounidense. Sin embargo, la estocada ha sido a la francesa: Macron en el Congreso de EEUU, a modo de despedida, marcó sus diferencias con la política de Trump en materia de inmigración, medioambiente y la guerra comercial, puntos claves y banderas del presidente estadounidense.
El mandatario galo ha hecho hincapié en que, si la actual administración norteamericana no está de acuerdo con la escena internacional heredada, "es posible construir un orden mundial para el siglo XXI basado en un nuevo multilateralismo, que sea más eficaz, más responsable y que dé resultados concretos". En este contexto, ha puesto en valor la alianza entre Estados Unidos y Francia, que se ha encargado de recordar a Trump en este viaje oficial. "Compartimos la historia de los derechos civiles (...) Se me vienen a la cabeza miles de ejemplos".
El principal objetivo de esta gira de tres días era persuadir a Trump de que mantuviera el actual acuerdo nuclear con Irán hasta que las partes --Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Rusia y China, además de la República Islámica-- fueran capaces de encontrar un buen reemplazo. Macron declaró el martes ante Trump tras reunirse en la Casa Blanca que Francia estaba dispuesta a negociar un nuevo acuerdo nuclear con Irán. El magnate neoyorquino, por su parte, insistió en calificar de "insano" y "ridículo" el pacto con el régimen de los ayatolás.
Francia y el resto de países europeos implicados ven en el acuerdo nuclear una garantía de estabilidad para la región, dada la activa implicación de Irán en los conflictos de Siria, Yemen o Irak y la creciente hostilidad de sus vecinos del Golfo.
"Sea cual sea la decisión que tome Estados Unidos (...) no daremos vía libre al conflicto de poderes en Oriente Próximo", ha subrayado. "Creo que podemos trabajar juntos para construir un acuerdo integral para toda la región, para nuestros pueblos", aseguró el presidente francés.