Un granjero y agricultor de Bélgica ha desplazado más de dos metros la frontera con Francia tras desplazar un mojón fronterizo que obstaculizaba las labores de arado de la tierra.
Fue un grupo de excursionistas apasionados por la geografía y la historia el que descubrió el desplazamiento de la frontera tras comprobar que la piedra no se encontraba en el mismo lugar que marcaba el mapa. Tal y como informó un vecino de la zona, un agricultor habría desplazado varios metros la ropa para así poder trabajar con mayor facilidad.
Ignorando que con su acto estaba "invadiendo" territorio francés, el agricultor ganó 2'2 metros cuadrados para su país tras modificar una frontera que había permanecido inamovible desde 1819 cuando, tras la batalla de Waterloo, los países decidieron fijar la frontera actual.
El alcalde de la localidad en la que se produjeron los hechos llamó al agricultor para volviera a dejar la roca en su lugar y así evitar que el Ministerio del Exterior tuviera que involucrarse. Tal y como explicó el propio edil "Los límites se acordaron entre los reyes de Francia y los Países Bajos en 1819, tras la restauración de la monarquía [...] y después de la batalla de Waterloo".
La noticia no ha tardado en viralizarse en redes sociales y ciudadanos franceses y belgas han ironizado sobre una situación que, por otra parte, se ha quedado en tan sólo una simpática anécdota.