Sol en invierno en España: guía para redescubrir Canarias en temporada baja, con mejor clima y precios
Con temperaturas suaves durante todo el año y menos turismo entre noviembre y marzo, las islas son el destino ideal para disfrutar del sol, el mar y descansar
Tabarca, la isla habitada más pequeña de España: la belleza natural de su paisaje la hace única
MadridCuando el invierno llega a buena parte de la península, todavía queda una parte de España donde sigue brillando un sol amable, con temperaturas maravillosas y una luz que invita a salir, caminar y disfrutar sin abrigo. Son las Islas Canarias. Es lo más parecido a una eterna primavera, y quizá por eso, cada vez más viajeros sénior redescubren el archipiélago como el mejor destino nacional para escapar del frío sin cruzar un océano.
Lo más interesante es que, en los últimos años, el perfil del visitante ha cambiado mucho. Ya no solo visitan las islas aquellos que quieren tumbarse en una hamaca o hacer mil excursiones rápidas. También están los que quieren descansar sin estrés, moverse con calma y reconectar con el ritmo natural de la vida. La temporada baja se ha convertido en el secreto mejor guardado de los viajeros más experimentados que encuentran hoteles tranquilos, playas menos concurridas, clima perfecto y precios moderados.
Además, Canarias ofrece algo que pocos destinos pueden prometer en invierno: sol garantizado y diversidad. En un mismo viaje se puede pasear entre plataneras, caminar sobre arena volcánica, subir a un volcán nevado o escuchar el sonido del mar mientras se prueba un vino malvasía.
Una de las grandes ventajas de Canarias es que cada isla tiene su propio ritmo y su propio bolsillo. En invierno, los precios suelen bajar entre un 20% y un 30% respecto al verano, y es posible disfrutar de hoteles de 4 estrellas por lo que en agosto costaría un apartamento básico.
Tenerife: volcanes, vino y pueblos con historia
Tenerife ofrece el equilibrio ideal entre naturaleza y confort. En invierno, un hotel de 4 estrellas en el norte de la isla (La Orotava o Puerto de la Cruz) ronda los 80-110 euros por noche con desayuno incluido, mientras en que el sur (Adeje o Los Cristianos) el precio medio sube a 120-140 euros por su clima aún más templado.
Un plan que no puede faltar si se visita la isla es ir a La Orotava, probar los vinos volcánicos en el Valle de Güímar y subir al Teide con un guía local.
Gran Canaria: la isla de las mil caras
La isla de Gran Canaria permite combinar mar, cultura y montaña sin tener que hacer grandes traslados. En temporada baja, los apartamentos con vistas en Maspalomas o Mogán se encuentran desde 90-120 euros por noche, mientras que en la capital, Las Palmas, los hoteles urbanos descienden a 70-90 euros la noche.
Si se visita la isla se recomienda visitar el Museo Canario, perderse por Vegueta, pasear por Las Canteras y cenar pescado fresco frente al mar.
Lanzarote: arte, fuego y silencio
La isla de César Manrique es perfecta para el invierno. Las temperaturas suaves, unos 22ºC de media y la menor afluencia de turistas permiten alojarse en hoteles boutique o casas rurales entre 85 y 120 euros la noche.
Entrar a los Jameos del Agua o al Parque Nacional de Timanfaya cuesta unos 12 euros por persona pero es un plan obligatorio al visitar la isla, y también se aconseja disfrutar de una comida de bodega de La Geria con vino local. Es un destino ideal para los que prefieren arte, paisaje y calma con un presupuesto medio.
Fuerteventura: arena dorada y mar infinito
En invierno, Fuerteventura baja sus tarifas a niveles irresistibles. Los hoteles junto al mar en El Cotillo o Caleta de Fuste rondan los 80-100 euros, y los apartamentos rurales en el interior pueden hallarse desde 60 euros.
Un imprescindible para explorar la isla es el coche de alquiler, que se puede conseguir por 25-30 euros al día. Con playas vacías y buen clima, es de las opciones más económicas para disfrutar de la tranquilidad.
La Palma: senderos, estrellas y aire puro
En esta isla lo más impresionante es el entorno. Los alojamientos rurales con encanto cuestan entre 70 y 100 euros por noche, y los menús con producto local rara vez superan los 20 euros.
Un imprescindible si se visita La Palma es visitar la Caldera de Taburiente, solo hay que reservar plaza de acceso si se realiza la ruta completa. Otro plan que se recomienda son las excursiones de astroturismo en el Roque de los Muchachos, que rondan los 30 euros por persona, y la experiencia vale cada minuto de cielo despejado.
La Gomera: la isla que escucha
Llegar en ferry hasta La Gomera desde Tenerife cuesta alrededor de unos 40 euros ida y vuelta, y ya el viaje es parte del encanto. Los pequeños hoteles familiares en Hermigua o Valle Gran Rey ofrecen estancias con desayuno desde 75-90 euros.
El Parque Nacional de Garajonay no tiene coste de entrada y las comidas caseras en fondas locales rondan los 15 euros. Una escapada completa de 3 noches a la isla puede salir por menos de 400 euros por persona, con el transporte incluido.
El Hierro: el lujo de la sencillez
La isla más pequeña y tranquila del archipiélago también es uno de los destinos más asequibles. Los apartamentos con vistas al mar en Frontera o la Restinga se alquilan desde 65-85 euros, y una cena con pescado local y vino herreño cuesta unos 20 euros. El coche de alquiler ronda los 30 euros diarios y la isla se recorre en menos de una hora de punta a punta. Pocos lugares de Europa ofrecen tanta paz por tan poco.
