Todos los secretos que encierra la sangre: “Su potencial como ‘chivata’ de enfermedades es inabarcable”

  • El plasma circula por todos los órganos y tejidos del cuerpo y puede chivar lo que pasa en el cuerpo

  • Los análisis habituales que más se hacen son bioquímicos

  • Últimamente se hacen también análisis genéticos al ADN de las células sanguíneas.

Recientemente se ha anunciado que a través de un análisis de sangre especifico se puede detectar hasta 50 tipos diferentes de cáncer en estadios muy tempranos, otro tipo de análisis puede mostrar la probabilidad de tener alzhéimer y se acaba de publicar también un estudio que asegura que analizando sangre de una mujer embarazada, a partir de la semana 10 de gestación, es posible identificar al casi el cien por ciento los posibles problemas genéticos sin necesidad de amniocentesis.

Teniendo en cuenta que circula por todos los órganos y tejidos del cuerpo el potencial de la sangre como chivato o reveladora de enfermedades se ha mostrando muy útil y por eso hoy en día hay tantos estudios científicos centrados en averiguar qué más nos puede contar.

"La verdad es que el potencial es inabarcable y las posibilidades son infinitas. La sangre es un fluido rojo que, como decían nuestros antepasados, tiene algo de mágico, hasta tal punto que si la perdemos nos morimos", comenta Cristina Arbona directora del Centro de Transfusión de Valencia y vocal de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia.

Una fórmula mágica compuesta de agua, proteínas, nutrientes y células vivas ( glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas) que suele ser analizada en los laboratorios clínicos para conocer el estado de esas células, sus sustancias químicas, proteínas y otros componentes. No hay que olvidar que cada uno de estos tipos de células tiene una función especial y fundamental para la vida:

  • Los glóbulos rojos son necesarios para transportar oxígeno por todo el cuerpo.
  •  Las plaquetas ayudan a detener el sangrado.
  • Los glóbulos blancos combaten las infecciones.

Pero ahora ya se sabe que la información y potencial de la sangre va más allá de lo que en un principio se pensaba: "Los análisis más habituales muestran alteraciones de moléculas avisando de enfermedades tumorales, de los niveles de glucosa, información del tiroides, de los riñones, del hígado. Pero depende lo que quieras saber buscas un determinado análisis u otro", explica la doctora.

Lo que la sangre nos puede decir

La sangre lo sabe todo, o casi todo. Y efectivamente solo hay que saber dónde buscar.

Los análisis que más se hacen son bioquímicos del plasma (analizando el ADN que va por el plasma) a través de proteínas que al elevarse en sangre dan pistas de si el órgano está sufriendo alguna lesión y por eso ese marcador se eleva.

Son esos análisis que piden los médicos en atención primaria para saber el funcionamiento de los órganos a través de proteínas: "La sangre lo que hace es diagnosticar pero a base de estudios bioquímicos . Al elevarse en sangre dan pistas de que el órgano puede estar sufriendo alguna lesión y por eso ese marcador se eleva. Pongamos que la bilirrubina se eleva más de lo necesario, pues ya nos está indicando que lo mismo tienes una obstrucción en la vesícula", aclara la doctora Hada Matcher, médico especialista en bioquímica clínica y responsable del diagnóstico molecular del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

Un buen detector de lo que ocurre en el cuerpo es el plasma. Es por donde circula todo, hasta las bacterias por eso, al analizar su ADN tenemos muchos datos. Es por tanto el primer chivato de lo que nos pasa.

"El plasma pasa por todo el organismo `por tanto si se está desarrollando un melanoma en el pie, vas a tener los genes mutados circulando por tu cuerpo y cuando te haces el análisis de sangre puedes encontrar esos genes", explica Matcher.

Pero la novedad los últimos años es que además de los análisis bioquímicos en plasma, se está haciendo un análisis genético al ADN de las células sanguíneas. “Con una muestra de sangre se analiza el ADN de los leucocitos para analizar, por ejemplo, el cáncer hereditario (que es el 5% de los cáncer que se producen). El análisis resultante te dice si tienes un gen de susceptibilidad al cáncer. Que no es que lo vayas a coger, pero te advierte de que tienes predisposición puedes poner medios para evitarlo", aclara la doctora.

 La secuenciación del ADN clave

 Al margen de lo que los análisis bioquímicos nos pueden contar ahora se está trabajando también con nuevas tecnologías que permiten analizar el genoma humano. Este está formado por unos 20.000 genes y, aunque su comprensión es hoy por hoy inabarcable, lo que sí está muy avanzado es la secuenciación del Exoma de la persona en sí.

La información genética se encuentra en regiones denominadas exones. Al conjunto de exones de nuestro genoma se le conoce como Exoma y sería el segundo gran chivato con el que contamos para hablar de nuestra salud.

 “Muchos laboratorios estamos trabajando con el Exoma completo, lo cual implica que al analizarlo tienes todo el análisis genético de un gen, o de los 23.000 que forman el Exoma. Y eso nos puede contar tantas cosas, sería como un streaming genético de la persona”, comenta la doctora Matcher.

Pero ¿qué se conocería al hacer el análisis genético de todas las proteínas que fabrica un organismo humano? Pues podrían ser muchísimas patologías. “Hay algunos genes que ya se sabe que están asociados a una enfermedad, hay genes que indican que se es susceptible a padecer algo, y hay genes que no se sabe si en un futuro influirá o no, pero se puede guardar en la clínica del paciente para futuras consultas”, explica Matcher.

Un tesoro de información que podría completar el diagnóstico del análisis bioquímico del plasma para que nos se nos escape nada.

"Y en un futuro se verán muchas más cosas porque todavía no sabemos, ni siquiera alcanzamos, todo lo que la sangre nos puede contar", concluye la doctora Arbona. Un fluido mágico con muchos secretos que revelar.