Moreno extra o tanorexia: un experto nos da las claves para detectar el límite

Cristina Abel 24/06/2018 10:07

¿Qué es la tanorexia?

Los primeros estudios sobre la tanorexia (adicción al bronceado) se remontan a hace poco más de una década, cuando la comunidad científica dermatológica empezó a detectar una incidencia mayor de personas jóvenes que perdían el control en el proceso del bronceado un enganche a los rayos solares similar al que padecen los alcohólicos o las personas fumadoras.

"Es un trastorno psiquiátrico, en el que el paciente por mucho el Sol que tome nunca se ve suficientemente moreno y tiene una actitud de excesiva exposición solar, que puede llegar a ser patológica", señala Javier J. Domínguez Cruz, del Hospital Universitario Virgen del Rocío

Los casos más peligrosos de tanorexia pueden ser considerados muy peligrosos porque pueden tener efectivos secundarios muy dañinos, como el cáncer de piel. Los casos más extremos pueden deberse a un trastorno dismórfico corporal, que consiste en ser demasiado críticos o exigentes con nuestro físico o imagen, muy similar a lo que padecen las personas diagnosticadas con anorexia.

Melanoma y cáncer basocelular

"Pacientes con tanorexia como tal no nos consultan en dermatología, lo que sí vamos viendo es que a edades más precoces llegan pacientes con cáncer cutáneo. El cáncer cutáneo se divide en dos tipos: melanoma y cáncer basocelular. En el primer caso, hasta hace muy poco, eran pacientes de edad muy avanzada, de hecho la media eran los 65 años, pero cada vez tenemos más casos de personas de 28 a 30 años con tumores que son provocados por la exposición solar excesiva", añade el miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

Fotoenvejecimiento causa manchas y arrugas

Para saber distinguir si tomar el sol se está convirtiendo en una obsesión, debemos tener en cuenta si hay una compulsión por ir ganando tonos en nuestro bronceado y, pese a tener ya una tonalidad muy oscura, nos parezca que no es suficiente; sentir frustración crónica porque nunca estamos satisfechos; acompañada de una pérdida de apetito provocada por la sensación de falta de horas al sol.

Las personas que padecen este trastorno nunca ven el límite y se produce, además, el efecto contrario al que desean porque la exposición solar excesiva provoca el envejecimiento de la piel. "La gente piensa que las manchas que tiene en la piel son consecuencia de la edad y no lo son, como tampoco las arrugas, que son una consecuencia del fotoenvejecimiento", indica el especialista.

Del grano que no se cura a la regla ABCDE

Domínguez nos recuerda que existen dos tipos de cáncer de piel: el melanoma y el carcinoma basocelular, este último es el más frecuente en el ser humano, más que el de mama, colón y pulmón juntos, pero se le da menos importancia porque su tasa de mortalidad es muy baja. ¿Cómo los distinguimos?

"El carcinoma basocelular es habitualmente una pequeña herida o un pequeño grano que suele estar en la espalda o en la cara y que con el paso del tiempo, uno o dos meses, no termina de curarse", indica Domínguez, que para descartarlo es conveniente acudir al dermatólogo de zona.

"En el caso del caso del melanoma hay que aplicar la regla de la ABCDE (asimetría, bordes irregulares, más de tres colores, diámetro de más de seis milímetros y evolución). Un lunar negruzco que va cambiando de color y de forma periférica, que se va tornando asimétrico con más de dos colores, tiene que ser analizado por un médico para descartar que es un melanoma", añade.

¿Qué debemos hacer?

Como regla general hay que recomendar que tengan una exposición solar saludable. Antes de ponerse al Sol deben protegerse (una media hora antes) con una protección solar superior a 30 o de 50, y a las dos o tres horas volver a echar esa crema”, señala el dermatólogo, que advierte ser especialmente cuidados en la infancia y en la adolescencia porque "las quemaduras en esas edades son uno de los principales factores de riesgo para que a lo largo de tu vida tener cáncer cutáneo y melanoma".

"En muchas ocasiones son lesiones benignas, pero los especialistas deben examinar a esa personas porque si se diagnostica pronto, el pronóstico es excelente, pero si se hace tarde, aunque hay tratamientos buenos, el pronóstico puede no ser tan bueno", indica.

Protección extra para los más claritos

El doctor considera que cualquier protección física, como el uso de sombreros, gafas, camisetas, nos ayudarán a proteger nuestro cuerpo, sobre todo en personas de pieles y ojos claros, que son los que tienen un mayor riesgo de padecer cáncer de piel y melanoma.

La hora punta, la más peligrosa

La mejor hora para ponerse moreno de manera saludable es a primera de la mañana y a última de la tarde. "Entre las doce de la mañana y las cuatro-cinco de la tarde es la peor de todas porque hay más posibilidades de quemaduras, coincide con las horas en las que las personas pasan más tiempo en la playa o en las piscinas", advierte.

Para la psoriasis y el vitíligo, control médico

A las personas que padecen alguna enfermedad en la piel (psoriasis, dermatitis atópica y dermatitis atópicavitíligo) se les recomienda que tomen el sol o rayos uva, pero es preferible que lo hagan en los centros médicos y bajo control médico asistido.