Los glaciares de los Alpes se derriten incluso más rápido de lo que temían los más pesimistas. El glaciar que se encuentra en el sur de Suiza ya ha perdido en lo que va año el doble de superficie helada de lo habitual, y aún queda verano.
A este ritmo, a finales de siglo habrá desaparecido casi por completo. “Les dejamos a nuestros hijos y nuestros nietos”, dice un turista que se encuentra de visita por la zona, una catástrofe.
En un puente construido para cruzar un lago en Hungría ha dejado de cumplir su función porque debajo solo queda tierra seca. Las fotos expuestas en la orilla nos recuerdan que aquí se celebraban competiciones de pesca.
La sequía que afecta también a Inglaterra nos permite descubrir desde el aire un jardín oculto durante 300 años. Sin lluvias, el césped desaparece y vemos el mismo esquema que dibujaron sus creadores en el siglo XVIII.