Los adeptos de la secta de Tenerife consumían cocaína, estramonio y alucinógenos y debían aportar una "importante cantidad de dinero"

En las ceremonias se realizaban sacrificios de animales domésticos y se consumían sustancias peligrosas
Desmantelan una secta en Tenerife: sometían a los adeptos a rituales, drogas y sacrificios de animales
La secta de Santa Cruz de Tenerife utilizaba rituales santeros - bajo una supuesta apariencia de espiritualidad- para ejercer control psicológico sobre los adeptos. Según informa ‘Diario de Avisos’, en las ceremonias se utilizaban objetos y figuras que representaban supuestas deidades, se realizaban sacrificios de animales domésticos y se consumían sustancias peligrosas.
La portavoz de la Policía Nacional, Ana Ramón, señala que entre esas sustancias se encontraba el estramonio, la cocaína, el póper y otros alucinógenos que se ingerían durante los rituales.
Los adeptos aportaban grandes sumas de dinero
Este entramado tenía como objetivo obtener importantes cantidades de dinero a cambio de supuestos beneficios personales, para evitar males espirituales y enfermedades. El grado de control psicológico que ejercía el líder de la secta era tan intenso que algunos necesitaron tratamiento psiquiátrico tras abandonar el grupo.
En el operativo policial intervinieron el Servicio Canario de Salud, a través del servicio de ordenación farmacéutica y de la inspección de Sanidad, así como la Dirección General de Ganadería del Gobierno de Canarias. Y participó un biólogo de la Fundación Neotrópico, que actúa como autoridad designada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
El líder de la secta, en prisión provisional
La Policía Nacional advierte del peligro que representaba esta secta cuyo líder ya se encuentra en prisión provisional tras una investigación que acabó con cinco detenidos. Las autoridades recuerdan que los ciudadanos disponen de un correo electrónico, sectasdestructivas@policia.es, para denunciar este tipo de prácticas o cualquier actividad similar.
Los agentes destacan la importancia de alertar ante cualquier situación de manipulación psicológica, abuso económico o riesgo para la salud.
