El accidente se registró sobre las 14.30 hora local (20.30 GMT) en las cercanías del aeropuerto internacional La Aurora, según el director de Aeronáutica Civil, Juan José Carlos.
La aeronave, una Seneca con matrícula guatemalteca, llevaba muy pocos minutos de vuelo cuando por razones ignoradas se precipitó a tierra y cayó sobre una vivienda privada, que estaba desocupada.
Además del piloto Héctor Ramos, las otras cinco víctimas son los pasajeros Rafael Barreda, Claudia Porras, Joseph Godoy, Juan Brenes y Helmut Winstzer, todos guatemaltecos y empleados en distintas dependencias de la municipalidad capitalina, según la primera versión.
Brenes trabajaba como director del fideicomiso de apoyo a la planificación urbana de la municipalidad capitalina.
Los cinco pasajeros, que también eran catedráticos de la privada Universidad Francisco Marroquín, se dirigían a Belice según el plan de vuelo, explicó Carlos, que no detalló las razones del viaje.
El aparato siniestrado era propiedad de la empresa privada Aeroservicios.
Al parecer, la avioneta perdió altura y al hacer un viraje brusco hacia la izquierda cayó a tierra, de acuerdo con las primeras averiguaciones, precisó Carlos.