Se hace un bypass gástrico para mejorar su salud que "casi le cuesta la vida"

Informativos Telecinco 13/02/2018 13:58

Hazel Orchard, una trabajadora social de Gales, Reino Unido, tenía obesidad y estaba poniendo en riesgo su salud. Además, como consecuencia de esto, padecía incontinencia y se veía incapacitada para realizar tareas cotidianas por sí misma como vestirse, atarse los zapatos o ducharse.

“No podía alcanzar mis pies, no podía ponerme mis mallas y no podía llevar a cabo mis propias necesidades de higiene personal. Por ello, indagué sobre un bypass gástrico, pero como no tenía problemas con la presión arterial o el colesterol y no tenía diabetes, no cumplía con los criterios del hospital NHS” declara.

Tras ser rechazada en ese hospital, la mujer encontró un hospital privado en el que sí aceptaron ponerle un bypass gástrico por la suma de unos 11.000 euros. Crearon una pequeña bolsa en la parte superior de su estómago mediante la utilización de grapas, para crear una sensación de saciedad ingiriendo cantidades muy pequeñas de comida.

No obstante y según recoge Daily Mail, a los pocos días comenzó a sentir un dolor muy agudo en el abdomen, que resultó ser una rotura de intestino, que podría causarle la muerte.

“He perdido el 78% de mi peso corporal, pero esto casi me cuesta la vida. Le pregunté al médico si iba a morir porque me sentía muy mal y ellos le dijeron a mi hija y a mi vecino que se preparasen para lo peor. Esto me ha costado mis amistades, mi dignidad y me ha quitado mi sustento e identidad. Ahora, durante el resto de mi vida no puedo comer nada más que porciones de alimentos infantiles", explica Orchard.

Actualmente, se está recuperando de las operaciones y permanece estable.