Los agentes de la comisaría del distrito madrileño de Fuencarral, que se han hecho cargo de la investigación, tratan de identificar el cadáver del hombre de entre 50 y 60 años. No portaba DNI, ni otra documentación identificativa. Todo indica que llevaba tres o cuatro días muerto, aunque será la autopsia que se le practique hoy la que lo determinará.
Precisamente, el fuerte hedor que desprendía la zona alertó al personal de mantenimiento y seguridad, que fueron los que encontraron el cadáver. Se encontraba en posición de cúbito supino y estaba policontusionado, con fracturas abiertas compatibles con una importante caída.
El hombre, que iba vestido con un pantalón corto y una camiseta de cuadros, no es empleado del hospital pero entre sus pertenencias le fue encontrada una orden de trabajo, por lo que los agentes investigan ahora si pertenecía a alguna subcontrata de mantenimiento. También buscan entre personas denunciadas como desaparecidas.
Además, llevaba una llave maestra que le permitía abrir y cerrar los montacargas y acceder a zonas restringidas. Por eso, los agentes están investigando las cámaras de seguridad de la zona y hablando con testigos que ayuden a determinar quién es esta persona y qué le ocurrido.
A pesar de que todos los indiciones apuntan a accidente laboral, la Policía mantiene abiertas todas las líneas de investigación, han indicado las mismas fuentes.