Todo apunta a un fallo humano en el accidente aéreo de Mallorca en el que murieron siete personas
Los testigos señalan que los aparatos iban muy bajos
La mujer del piloto del helicóptero fue testigo del accidente
Primero de los tres días de luto en Mallorca por el accidente entre una avioneta y un helicóptero que ha dejado siete muertos, entre ellos dos niños. Se investiga qué pudo ocurrir para que las dos naves chocaran en pleno vuelo, aunque todo apunta a un fallo humano.
A las dos menos veinticinco de la tarde de ayer tenía lugar la colisión. José estaba con su familia en la piscina. Como Juan, que estaban terminando de comer. Son vecinos mallorquines testigos del accidente entre una avioneta y un helicóptero, en el que murieron siete personas.
En la caída, de los aparatos se han ido desprendiendo trozos que iban cayendo por toda la zona, como nos cuenta Antonio.
De servicios de emergencia ha habido hasta psicólogos para atender a las familias. La mujer del piloto de la avioneta, Juanjo Vidal, valenciano, ha visto cómo la aeronave caía al poco de salir de Binissalem.
Hoy es el primero de los tres días de luto.
Cédric Leoni, italiano, era el piloto del helicóptero para vuelos turísticos. Había salido de su base en Son Bonet. Poco después, recogió a sus clientes, un matrimonio alemán y sus hijos, menores de edad. Son cinco de los fallecidos.
El ultraligero era una avioneta Aeroprakt. Era el segundo vuelo del día. Juanjo iba acompañado de un amigo mallorquín. También han fallecido.
Ahora hay abierta una investigación. Los testigos aseguran que los aparatos iban muy bajos. Todo apunta a un fallo humano.