El pueblo de Molina de Aragón (Guadalajara) ha registrado las temperaturas más bajas de la Península este invierno. En la mañana de este viernes, sus habitantes han caminado a 11 grados bajo cero, pero no han dejado de trabajar en ningún momento: "Aquí se vive divinamente".
Pero esta no ha sido una situación excepcional, ya que la localidad alcanzó este martes una temperatura de 9,8 grados bajo cero, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología.
Tras ella, se encuentra la localidad segoviana de Cuéllar, que le siguió muy de cerca cuando marcó a las 7:00 horas de la mañana del martes los 9,7 grados bajo cero.
Con todo, el frío no asusta a su vecinos, que han seguido trabajando y haciendo vida normal y aún se muestran positivos porque no ha nevado: "Es un frío seco y sano". Así lo ha asegurado a Informativos Telecinco la concejala de Molina de Aragón, Juana Dolores Morales Rodríguez, desde la plaza del Ayuntamiento. Canaria de nacimiento, la edil declara que, pese al frío, el pueblo luce sol.
"Llevo aquí 40 años y no me he muerto", apunta. Morales lamenta que, cada año, recibe llamadas de los medios para preguntarle por el frío glaciar de invierno, pero nunca para hacerlo del verano, donde llegan a las temperaturas mínimas(8 grados en julio el pasado verano): "Nosotros aquí estamos gozando porque por la mañana hace fresco, a mediodía hace una temperatura de calor y, después, duermes divinamente".
Pese a los datos publicados por la Aemet, la concejala asegura que en Molina, "tiene un clima precioso". "Es una maravilla vivir aquí", añade la canaria.
Pero, ¿cómo se prepararse para un invierno que sabes de antemano que será duro? Morales Rodríguez tiene claro que la única alternativa es "echar más leña al fuego" y, para que lo tiene de gasoil, "un depósito más". Eso sí, los vecinos de la localidad tienen que hacer un esfuerzo extra para su bolsillo.
Los antecedentes meteorológicos del municipio, ubicado al noreste de Guadalajara, preceden a este título. En el año 1952, el pueblo convivió con -28 grados, una temperatura que volvió a repetirse en 1963. En una fecha un poco más reciente -2011- Molina de Aragón hizo estremecer a toda la Península con sus 13 grados bajo cero en el mes de enero.
El municipio cuenta con 3.403 habitantes, según datos del Instituto Nacional de Estadística de 2016, y se encuentra a 1.062 metros de altitud.