Parece el argumento de una película, pero no, sucedió de verdad. En Málaga. Una mujer orquestó una encerrona para propinarle una paliza a un hombre que, presuntamente, había realizado tocamientos de carácter sexual a su sobrina.
La menor le había contado como el padre de una amiga, de 53 años, le había tocado sin su consentimiento, por ello la mujer comenzó a investigarlo. Descubrió que se dedicaba a la albañilería y allí comenzó la encerrona. Consiguió un teléfono de contacto y le solicitó presupuesto para una pequeña reforma en el baño. Tras dárselo, aceptó, y se citaron en la vivienda para llevar a cabo las obras. Él se personó con sus herramientas de trabajo en el domicilio y una vez dispuesto a realizar la reforma, cuando le dio la espalda a la mujer, esta le atacó con la pata de una silla, propinándole una gran paliza y recriminándole lo que le había hecho a su sobrina, según informa el 'Diario Sur'.
Ambos, detenidos
El hombre, ensangrentado, huyó de la vivienda. Ella, llamó a la policía y confesó con detalle lo ocurrido. Una patrulla que se dirigía al domicilio de la mujer encontró al hombre ensangrentado en la calle. Este le dijo que había sufrido un atraco en plena calle.
Los agentes relacionaron ambos casos y los detuvieron a los dos. A ella por un delito de homicidio en grado de tentativa, tras la paliza propinada. A él, acusado de tocamientos a una menor, después de que los agentes se entrevistasen con la víctima.
A partir de ahí, el Grupo de Menores (Grume) de la Comisaría Provincial, con ayuda de Policía Científica, continúa la investigación para aclarar si se habían producido los supuestos abusos, que serían el móvil de la agresión.