Consejos fáciles para recuperarte tras los excesos de las vacaciones

  • El secreto, la alimentación, el deporte y el sueño

¿Cuántos kilos has puesto este verano? Seguro que estás más rellenito que en junio. Si eres de esos que ha descuidado el ejercicio durante las vacaciones de verano o si eres de esos que cada septiembre promete cuidarse te vamos a dar una serie de consejos para ponerte en forma.

Llega septiembre y se acabaron las cervezas, los fritos y las horas muertas al sol o en la piscina. Engordar siempre es más fácil que adelgazar y perder la forma física siempre es más fácil que recuperarla. Por eso, si queremos recuperarnos tras los excesos veraniegos cuanto antes nos pongamos en forma mejor.

La OMS define el sobrepeso como un Índica de Masa Corporal (IMC) igual o superior a 25, y la obesidad como un IMC igual o superior a 30. Según datos de DKV, el IMC de los españoles se sitúa de media, a la vuelta de vacaciones, en 26,98 para los hombres y en 25,55 para las mujeres, lo que indica sobrepeso.

A continuación damos algunos consejos, aptos para deportistas relajados o para quienes nunca han encontrado el momento de darle una oportunidad al deporte:

  • Dieta. Lo primero es desterrar las cervezas, los fritos o el picar entre horas. Los expertos aconsejan comer más verduras y frutas, aumentar las proteínas y reducir los hidratos de carbono. Lo ideal es que el plato contenga la mitad de verduras, un tercio de hidratos y un tercio de proteínas. Es recomendable comer cinco piezas de fruta al día. Beber es muy importante: agua, te… Siempre hay que estar hidratados.
  • Hay que hacer ejercicio, sí! La alimentación por si sola no hace milagros, hay que moverse. Cuanto más años sumamos menos deporte hacemos. Iniciar o retomar el deporte, ya sea en casa, en la calle o en un gimnasio es la mejor manera de relajar cuerpo y mente, además de hacer que se estimule la circulación sanguínea y a su vez se genere una piel más tersa y reluciente. Deberíamos buscar una actividad que nos distraiga y entretenga y establecerla dentro de nuestras rutinas. Hay que recordar que hasta que no pasen 21 días, no sentiremos esa necesidad de hacer deporte.
  • El sueño. Descansar bien es tan importante como introducir la actividad física en nuestra vida. Cuánto mayores somos peor dormimos. Un adulto debería dormir de noche y seguido entre siete y ocho horas para estar descansado. Evitar las siestas y establecer una rutina a la hora de dormir también puede ayudarnos a dormir mejor.