Todas las penitencias de 'La mesa de las tentaciones': del pacto a ciegas de Adara a la sorprendente decisión de Bosco con su madre

La nueva gala de 'Tierra de Nadie' con Carlos Sobera ha traído con sigo una sorpresa. 'La mesa de las tentaciones' ha vuelto a Honduras. Uno a uno, los supervivientes iban enfrentándose a sus mayores deseos gastronómicos a cambio de diferentes penitencias. Aceptarlas o rechazarlas estaba en sus manos.

Lo cierto es que todos ellos han decidido arriesgarse y afrontar diferentes retos a cambio de aquello con lo que llevan soñando meses. Recompensas como, por ejemplo, una tarta de chocolate, un enorme kebab o un bol de pasta carbonara.

Adara ha sido la encargada de inaugurar la dinámica. Una enorme tarta de chocolate le esperaba. Pero, lo que la superviviente no sabía es que iba a tener que ir ganándosela poco a poco. La tarta estaba formada por las cinco letras de su nombre y cada una de ellas suponía un esfuerzo.

Finalmente, y tras varias negociaciones, su mesa tentadora terminaba así: cinco penitencias, tres quintos de la tarta y un bocadillo equivalente a los dos quintos restantes. A cambio, Adara tendrá que vivir con los ojos tapados durante un día y caminará atada a Jonan y Asraf. Además, no hablará durante un día, no comerá nada que haya pasado por el fuego y se cortará el pelo 15 centímetros, algo que, por el momento, aún no ha descubierto. Ha aceptado sus tres últimas penitencias guiándose únicamente por la reacción del público en plató.

Por su parte, Artùr era el segundo en dirigirse a la mesa en la que les esperaba Laura Madrueño. En su caso, le esperaba un gran bandeja de sushi. A cambio, el ucraniano ha aceptado la penitencia de no poder tocar absolutamente nada de comida durante toda la semana. No podrá realizar repartos ni llevarse con sus propias manos la comida a la boca: le tendrán que alimentar.

El siguiente era Jonan. El influencer alucinaba al descubrir que debajo de su caja se encontraba una hamburguesa vegana XXL. Pero, si quería disfrutar de ella, tendría que hacer algo a cambio. La otra caja escondía algo: una maquinilla. Jonan aceptaba raparse el pelo al tres a cambio de la hamburguesa completa más kétchup, mayonesa y mostaza.

Cuando le ha llegado el turno al sobrino de Pocholo, no dudaba en bromear antes de descubrir qué recompensa le esperaba: "Si es una moto de agua te digo ya que sí". Pero no, no era una moto de agua. Lo que sí que podía ganar era un enorme solomillo wellington: "Me parece una tremenda barbaridad".

Tras analizar el plato y asegurarse de que por dentro estaba cocinado a su gusto, Bosco decidía aceptar su penitencia: renunciar a hablar con su madre por teléfono. "Mamá, nos vemos dentro de poco. Yo me lo como y pensaré en ti, te lo prometo", decidía mientras reía a carcajadas.

En 'La mesa de las tentaciones' a Asraf le han puesto delante uno de sus platos favoritos: un gigantesco kebab. Para poder disfrutar de este suculento plato, el superviviente tendrá que permanecer hasta nuevo aviso en taparrabos y se ha tenido que despedirse de la muñeca de Isa Pantoja, que custodiará con mucho cariño Laura Madrueño.

El concursante ha negociado además dos cuencos de chuches: “Me gustan los regalices, las fresitas…”, explicaba. La presentadora ha accedido y él, con mucha tristeza, ha besado la muñeca que le dio su novia y se la ha entregado a Laura. “Isa lo entenderá…”, aseguraba.  

La hija de Raquel Bollo se ha unido a Jonan. Para poder disponer de la comida que más disfruta con su novio, la pasta carbonara, Alma ha aceptado cortarse nada más y nada menos que 45 centímetros de su preciosa melena. Eso sí, habiendo negociado previamente que fueran dos en lugar de un bol los que disfrutara del plato italiano y añadiendo, además, un brownie como postre.

Hablamos con Lara Álvarez en su regreso al plató de 'Supervivientes', su casa durante siete años. Ahora, confiesa que le cuesta ver el programa desde casa, pero está feliz por su nuevo proyecto: 'Me resbala'. Además, le preguntamos si viviría la experiencia en Honduras en primera persona y esto es lo que responde. ¡No te lo pierdas!