Isabel Pantoja fue recibida hace 22 años como si fuese un Jefe de Estado en Perú. La tonadillera adoptaba a su niña Chabelita y un baño de multitudes la recibía en uno de los días más felices de su vida. Lejos de los resentimientos y los enfados que han empañado con los años la relación entre la madre e hija ha sido en 'Sálvame' por teléfono y por primera vez cuando ha dado su particular grito de auxilio.
Si cuando tuvo por primera vez a Chabelita en brazos declaró que era uno de los días más felices de su vida sus palabras eran también una demostración de tanto amor como se veía en sus gestos: "Me he sentido exactamente igual que cuando tuve a mi hijo, aunque menos doloroso, pero queriéndola igual".
Una alegría compartida también en aquel momento por el presidente de Perú Alberto Fujimori que sentía todo un honor que Isabel Pantoja adoptase a una niña peruana y decidió inmortalizar en un selfie histórico el feliz momento.
Una regocijo que se fue disipando con su llegada a España. Allí Isabel inició su hermetismo y decidió no dejarse ver con la niña para preservar su imagen. La familia reunida hizo piña con el antiguo miembro del clan: María del Monte para compartir la llegada de aquella niña en su vida y protegerla del exterior. Una defensa que con los años no ha podido controlar y, aunque ahora Isabel Pantoja agradezca por una parte el encierro de Guadalix para saber donde está y verla 24 horas al día es su niña la que se expone nuevamente en 'GH VIP 6' mientras la Pantoja sufra una vez más como madre.