Mari Luz, la demandante: "Mi hija hizo la comunión y evidentemente ese día era muy importante para ella entre otras cosas porque iba a poder estar con su padre y sus dos hermanos, a quienes prácticamente no ve nunca. Al final no fue un día feliz porque mi ex marido decidió irse del convite nada más empezarlo prácticamente. Por eso le exijo los 10.510 euros que me costó dicho convite y también una indemnización de 2500 euros porque mi hija se quedó con un berrinche espantoso más de media hora llorando".
Víctor, el demandado: "Bueno, esto no es tan sencillo porque yo me comprometí a pagar este convite con la única condición de que mi actual mujer, Pepa, fuese la encargada de elegir el menú, cosa que no se respetó por lo tanto me niego a pagar lo que ella me demanda. Mi mujer ha sido maltratada en todo momento, fue apartada de la mesa principal, en la iglesia estuvo apartada de los familiares y todo llegó a un punto de tensión que nos vimos obligados a marcharnos".
Mari Luz replica: "Yo cambié el menú porque yo soy diabética mi sobrina es celiaca y el menú no era adecuado".
El veredicto de Gustavo Larraz
Éste ha sido el veredicto del letrado: "