Fernando, el demandante: "Tengo un negocio familiar, una peluquería de toda la vida, que fue fundada por mi bisabuelo hace muchísimos años y ha ido pasando de generación en generación hasta que me ha llegado a nosotros, los hermanos, por la herencia de mi padre. Mi hermano Andrés, al swer mayor que to, se ha estado haciendo cargo mientras yo estudiaba pero ahora quiero 20.00 euros de mi parte de la herencia para montar mi propio negocio de transportes de mudanzas"
Andrés, el demandado: " Él no se ha hecho nunca responsable de la peluquería y amí no me puede venir ahora pidiendo 20.000 euros porque para dárselos tendría que rehipotecar el negocio, porque yo ya lo hice para comprarme una casa, y eso ahora mismo es imposible. Y yo no entiendo que un chico de 19 años como mi hermano venga ahora a pedirme este dinero cuando nuetsro padre se ha muerto hace sólo unos meses".
El veredicto
La letrada Isabel Winkels ha dictado sus sentencia. "El Código Civil dice que todo heredero podrá reclamar en cualquier momento la partición de la herencia. Esto quiere decir que Fernando está perfectamente legitimado para pedir lo que le corresponde. Otra posibilidad es que uno de ustedes compre la mitad del negocio al otro pero si esto no es viable la única solución sería la venta del mismo para conseguir el dinero, pero como es un negocio familiar y su pérdida sería muy triste para ambos creo que deben llegar a un acuerdo en cómo conseguir el dinero".