La trabajadora que plantó cara a los ladrones de Manises: "Abrí la puerta y peleé, ¡pero este qué cachondeo es!"

  • La empleada forcejea con el ladrón en la tienda y tira contenedores para que no escape con el coche

  • El ladrón decide atropellarla para escapar y los vecinos se vuelvan con la trabajadora

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Kelly Siqueira dejó una de las imágenes más impactantes en Manises tras enfrentarse a sus propios atracadores. La entrevistada es estanquera y confiesa en 'El programa de Ana Rosa' cómo el saqueador entró en el local y le dio conversación hasta llevarse todos los productos.

Las imágenes hablan por sí solas. El ladrón sube rápidamente al vehículo tras pelear con la empleada del estanco en el local, después la protagonista corre hacia el coche y tira varios contenedores para cortar el paso. Sin embargo, el caco no tiene piedad e intenta atropellar a la chica. Una acción que provocó la implicación vecinal y que dejó a Kelly herida de un pie.

"Me encuentro bien de ánimo, en esas cosas no me bloqueo, no lo hice por los productos o lo que me robaba...", dice mientras muestra su tobillo vendado. La empleada del estanco explica que cuando el ladrón se marchó "pensé 'no quiero ser la única, quiero ser la última".

A partir de ahí, Kelly reconoce que salió tras el caco y forcejeó dentro del local: "Te entra una impotencia... uno saca una fuerza donde cree que no hay, pero la hay". Además, tras seguir enfrentándose al ladrón en plena calle, la trabajadora insiste: "No me arrepiento de lo que hice, actué por justicia".

En cuanto al robo, Kelly S¡queira explica: "Él entró muy tranquilo, sabía lo que quería, quería bastantes cosas, me pidió dos cartones de cada producto, yo no lo entendía. Empecé a negociar el producto y luego él decidió lo que me quería robar".

La trabajadora confiesa que uno de los motivos por los que decidió plantar cara al ladrón fue que "éste viene a mi local de trabajo, decide qué me va a robar... pero este qué cachondeo es". Además, tras poner todos los productos en la mesa, le vuelve a pedir otro cartón y "me giro y al volver ya no estaba".

A partir de ahí, Kelly explica que "abrí la puerta y peleé con él". Por último, la trabajadora confiesa que su pensamiento en todo momento era la de transmitirle al ladrón "te voy a enseñar que aquí, en este pueblo, no se puede robar así".