Serrat, contra el edadismo: “No me molesta ser viejo, sino el trato que se da a los viejos"

"Cuando eres joven, eres fuerte, eres bello, pero es un estado temporal de la vida, relativo y provisional", reflexiona el cantautor catalán
Serrat, feliz con su jubilación a los 81 años: "No siento la amargura de echar de menos el escenario"
Joan Manuel Serrat se bajó oficialmente de los grandes escenarios en 2022, pero desde entonces su 'jubilación' no se ha parecido al estereotipo de retirarse y desaparecer. El cantautor catalán tenía claro que dejar de girar no equivalía a renunciar a la vida pública ni a la reflexión. Por eso no es raro verle en eventos culturales, homenajes y encuentros con aficionados, como el que ha protagonizado esta semana en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara (México).

Estas apariciones selectas suelen tener un tono de balance vital y profesional. Homenajes, mesas redondas y ruedas de prensa que ofrecen el placer y el lujo de seguir escuchando al maestro. En este último encuentro en México Serrat se mostraba reacio a aceptar la palabra jubilación, "que es muy fea, tanto como 'retiro".
Reordenando prioridades
"Simplemente, hace algo más de dos años, he dejado de subirme a los escenarios, sobre todo por la exigencia que suponen las giras. No siento otra añoranza que la de perderme por el mundo y compartir con la gente, pero por eso estoy aquí ahora. Tengo otras ventajas, muy cercanas a mis íntimos”, se explicaba en una rueda de prensa recogida por varios medios y agencias.
Su nueva situación le ha permitido reordenar sus prioridades, elegir proyectos y recuperar ritmos personales sin la obligatoriedad de la agenda. En ese sentido, el creador de 'Mediterráneo' siente la necesidad de reivindicar la utilidad y la voz de quien ya no está en la primera línea productiva.
"Eso que dicen que si te sientes joven lo eres, no sé... diferentes partes de mi anatomía se niegan a responder positivamente. Cuando eres joven, eres fuerte, eres bello, pero es un estado temporal de la vida, relativo y provisional (...) A mí no me molesta ser viejo, sino el trato que se le da a los viejos, tan desagradable y paternal, eso de 'quédese aquí sentadito", reflexionaba.
Curiosidad y cautela por la IA
Lejos de aislarse, Serrat mantiene una voz crítica sobre la actualidad. El papel de las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial le despierta curiosidad, pero también cautela: "La IA no me produce ningún espanto, lo que me asusta es el uso que algunos le dan. Me sucede lo mismo con la televisión, lo que me horroriza es lo que a veces la televisión me ofrece. Pero nunca critico la tecnología, siempre la ha habido, el tenedor es una tecnología”.
Serrat no contempla la fase vital por la que está pasando como una retirada ni como una pérdida, sino como un territorio en el que la experiencia, la libertad de elegir sin prisas ni estridencias y el tiempo recuperado permiten seguir aportando al mundo desde otro lugar. "Me gustaría morir en medio de canciones pues la música es el arte que acompaña a los seres humanos desde que nacen hasta que se van”, concluía.

