Buscaban un tren fantasma pero les sorprendió uno de verdad

Christopher Kaiser, de 29 años, esperaba lleno de curiosidad, con una docena de amigos, algún vestigio sonoro del supuesto tren fantasma, que se venía apareciendo durante décadas a los lugareños del condado de Iredell, en Carolina del Norte. De repente, un tren de tres vagones apareció y tuvieron que correr hasta 150 pies para salvarse. No todos lo consiguieron ya que Kaiser falleció atropellado, según declaraba el Sheriff del condado, Darren Campbell: "Estuvieron a punto de conseguirlo, no había otro modo de hacerlo llegados a ese punto", afirma.

Toda una leyenda

Al parecer, lo que Kaiser y sus amigos deseaban ver era un tren fantasma resultante de un accidente ocurrido el 27 de agosto de 1891, cuando un pasajero suicida hizo descarrilar en pleno puente siete vagones y llevando a la muerte a 30 personas. Se dice que en cada aniversario del suceso se oyen voces de ruedas tratando de frenar y el grito de los pasajeros. Incluso ha habido gente que afirma haber visto a un señor con un reloj de oro.

Por unas razones o por las otras, estas leyendas y rumores atrajeron a los jóvenes al puente.

El sheriff Campbell reconoce que existen esos rumores y visiones, pero no deja de indicar que no hay nada demostrado y que, por supuesto, él no ha visto nada en ninguna ocasión.

Una de las mujeres componentes del grupo del fallecido, que pidió no ser identificada, declaraba lo siguiente al respecto: "Tratábamos de confirmar lo que decía la gente, solo mirábamos y tratábamos de escuchar algo de lo que se decía". El fantasma, en esta ocasión, llegó demasiado lejos.