Griñán niega ante el Supremo haber conocido informes alertando de los ERE

Llega José Antonio Griñán. Y la expectación en el Supremo es máxima ante uno de los responsables de la trama de los ERE, según la juez Alaya. Griñán no se ha librado de los controles de seguridad. Una planta más arriba le esperaba el juez Barreiro. Hasta las dos y media ha estado en la sala. Interrogatorio muy técnico sobre el sistema de ayudas públicas a empresas que concedían prejubilaciones supuestamente fraudulentas. Griñán basa su estrategia de defensa en convencer al Supremo de que aquellas ayudas fueron legales y, según sus abogados, no miró para otro lado porque nunca le alertaron de las irregularidades. Griñán, como lo hará Manuel Chaves, ha declarado voluntariamente. Una vez escuchados, el juez del supremo valorará si la causa debe seguir adelante contra ellos y pide el suplicatorio. Es decir, permiso a las Cortes para que sigan sujetos a este proceso penal. La juez Alaya señaló dos delitos, prevaricación y malversación. La pelota está ahora sobre este tejado.