Después de la primera manga, la segunda posición del campeonato estaba al rojo vivo. Y es que la victoria de Gonzalo de Andrés, unida a los abandonos de Palomeras y Mesalles, dejaban la clasificación más apretada que nunca. En la última carrera del año, de andrés tenía que ganar y esperar que Miguel Gallego no entrase en la zona de podio.
La Clio Cup estrenó formato esta temporada y cada fin de semana se han disputado dos carreras, una el sábado y otra el domingo. Esto ha provocado una mayor rivalidad y también un cambio de estrategia, porque los pilotos debían cuidar la mecánica al máximo para correr al día siguiente.
La igualdad que preside este certamen es la mejor baza para elevar el espectáculo. Y si a ello sumamos un circuito como el de Monteblanco, el resultado sólo puede ser emoción y adrenalina en estado puro. Y es que el andaluz es uno de esos escenarios que combinan curvas de todo tipo con largas rectas, siguiendo el estilo del moderno trazado de Paul Ricard.
Pasaban las vueltas y De Andrés se situaba líder de la prueba, con De La Reina segundo y Gallego tercero a más de diez segundos. Sólo una avería mecánica o una salida de pista podían evitar que el piloto catalán se hiciera con el subcampeonato. Además, De la Reina empezaba a recortar diferencias con De Andrés, que a falta de cinco giros para el final, cometía un pequeño fallo de pilotaje, dejando el triunfo en manos del vigente campeón.
En el Trofeo Junior, Iván Velasco le ganaba finalmente la partida a Arnau Merlos, mientras que en la 'challenge femenina', Marta Suria hacía lo propio con Raquel Moreras. El próximo año los Clio contarán con ligeras modificaciones que elevarán aún más su carácter y sus prestaciones. Competición al más alto nivel. Así es la Clio Cup de circuitos.