El espíritu de este certamen responde a la filosofía de las carreras de resistencia en las que dos pilotos afrontan con el mismo coche una prueba de larga duración. La estrategia y una conducción constante son las claves para triunfar en esta competición.
Cada equipo suele estar formado por un piloto amateur y otro denominado prioritario. Para fomentar la igualdad, los más experimentados deben cumplir un handicap de tiempo establecido durante la parada en boxes para cambiar de piloto.
Todos los coches corren juntos pero están divididos en tres categorías; dentro de una misma prueba existen varias batallas en función de la cilindrada de cada coche. Los Seat León de la copa fueron legión en la primera cita del año, que recorrerá los circuitos de Cataluña, Cartagena y Albacete. Los Clio Cup también tuvieron una nutrida representación.
El reglamento del campeonato ha logrado mucha igualdad. En la Copa de España de Resistencia corren coches con cilindradas que van desde 1.600 a 3.500 cc.
También están admitidos los coches procedentes de copas monomarca tanto de circuitos como de rallyes con una antigüedad máxima de 10 años. El sábado se celebran los entrenamientos oficiales mientras que el domingo se disputan las carreras, que pueden tener una duración de hasta una hora cada una.
En las categorías D4 y D3 los ganadores fueron Josep Mayolas y Marc Carol sobre un Seat León de 2005. En la segunda prueba, Luis Pons, que afrontaba por primera vez una competición de turismos y en solitario, se hacía con la victoria.
Rafael Gallego y Jordi Masdeu vencían en la clase D1 y D2 mientras que Luis Calleja y Roberto Carretón lograban el triunfo en la segunda prueba de esta categoría a los mandos de un Clio. La próxima cita del campeonato se celebrara en el Circuito del Jarama los días 5 y 6 de abril.