La 'Flama del Canigó' llega a Barcelona y cientos de municipios de Cataluña para encender las hogueras de Sant Joan
En cada municipio se ha recibido con la lectura de un mensaje común y diferentes tradiciones locales como Sardanes, Diables, Gegants o Castellers
Desde la cima del Canigó, donde se ha renovado el fuego, cientos de personas han recorrido los territorios de habla catalana para llevar la llama a cada municipio
Tradiciones de la noche de San Juan en Cataluña
BarcelonaLa 'Flama del Canigó' ha llegado a la plaza Sant Jaume de Barcelona a las siete de la tarde de este viernes en un acto en el que han participado los Gegants, los Capgrossos, l'Àliga y la colla castellera de la ciudad para recibir el fuego con el que esta noche se encenderán las hogueras de Sant Joan. Así mismo lo han hecho durante toda la tarde centenares de municipios de Cataluña y Valencia acompañados también de Diables, Balls de Bastons o Sardanes.
Según esta tradición de la víspera de San Juan, la llama, que había sido custodiada durante todo el año en el Castellet de Perpinyà (Francia), ha ascendido durante la madrugada a la Pica del Canigó, la cima de esta montaña pirinaica de especial significado para el catalinsmo, portada por miembros de la asociación Flama del Canigó d'Igualada.
Allí, en la cima, y en presencia de miembros de diferentes asociaciones culturales de diversos municipios, la llama ha sido renovada. Con la antigua llama se ha encendido una nueva, la de este año, en un acto que simboliza la unión de los territorios de habla catalana.
Después del descenso, ya con la nueva llama, se han encendido varias antorchas que se han distribuido hacia diferentes zonas de los Països Catalans, que a su vez, a mediada que avanzaban los kilómetros han encendido nuevos fuegos hasta llegar a centenares de municipios, que la han recibido con la lectura de un mensaje común y distintas tradiciones locales.
Esta tradición, iniciada a mediados del siglo XX a pesar de la dictadura, simboliza una misma luz iluminando las hogueras de los pueblos que comparten esta misma lengua, durante la noche más corta del año.