Cómo cuidar tu tocadiscos para que siga funcionando como el primer día
Para que la experiencia de disfrutar de un vinilo sea perfecta el reproductor debe estar en las mejores condiciones
El mayor enemigo del tocadiscos es el polvo que se acumula en su superficie y en la aguja, afectando a la calidad del sonido
Cómo cuidar tus discos de vinilo para que te duren toda la vida
Los uppers sabemos que la mejor manera de escuchar la música es en vinilo. Ya no se trata de que suene mejor que otros formatos -hay argumentos a favor y en contra que impiden poner a todo el mundo de acuerdo-, sino de que un auténtico melómano sabe apreciar su mayor rango dinámico y disfruta de la experiencia más activa que supone tener que levantarse a darle la vuelta al disco cuando termine una cara. Pero para que ese ritual sea perfecto hace falta también que el tocadiscos esté en las mejores condiciones.
El mayor enemigo de tu reproductor es el polvo. Cuando este se acumula en la superficie afecta a la calidad del sonido, además que de puede terminar dañando gravemente tu colección de discos. ¿Por qué tu equipo atrae tanto el polvo? El motivo principal es que los discos de vinilo generan electricidad estática, lo que hace que sea un imán de esas partículas minúsculas que son las responsables de los chasquidos y silbidos extraños que escuchas a veces al poner un disco.
Cuando este sucede es necesario hacer una limpieza del vinilo, pero también del tocadiscos para eliminar esos rastros de suciedad y que siga funcionando como el primer día. La OCU ofrece los siguientes consejos para conseguir que tu dispositivo puede girar y girar casi eternamente y su sonido siga siendo impecable.
La aguja
El lápiz óptico o aguja debe ser limpiado con regularidad con un cepillo especial o un líquido específico para aguja. Realiza movimientos suaves en dirección de atrás hacia adelante. Nunca al revés o de lado porque la aguja se podría doblar y el mal sería mayor.
Tampoco debes soplar sobre la aguja para eliminar el polvo acumulado porque expulsas partículas de saliva que pueden causar más problemas. Una vez al año aproximadamente revisa la aguja y el cartucho, porque si está desgastada puede dañar irreversiblemente tus vinilos.
Plato y superficies exteriores
El tocadiscos debería ser desempolvado al menos un par de veces a la semana, y no solo cuando vaya a ser utilizado. Hay que tener en cuenta que puede quedar polvo incrustado y dañar la aguja o el vinilo. Hay que usar un paño de microfibra antiestática para quitar el polvo, pasándolo suavemente por la superficie y comenzando siempre desde el centro hacia fuera.
Después de ese proceso hay que absorber la humedad que sobre usando un paño de microfibra seco. Importante evitar productos químicos abrasivos que puedan dañar el acabado. Y si notas que hay mucho polvo y suciedad acumulada, no frotes con fuerza. Es mejor dar varias capas para conseguir mejores resultados.
Cubierta
Es importante mantener cerrada la tapa cuando no se esté usando el tocadiscos para evitar la acumulación de polvo. La cubierta debes limpiarla con un paño suave y, de ser necesario, con un limpiacristales sin amoníaco.
Preamplificador de phono
Si el tocadiscos no tiene un preamplificador integrado, hay que mantener los cables y conexiones libres de polvo y bien ajustados para evitar ruidos interferencias.