Las algas del desierto que sobreviven a una sequía prolongada con solo una gota de agua

  • Estas algas arrojan luz sobre la tolerancia a la desecación en las plantas verdes

Pocos hábitats hay tan extremos para la mayoría de las plantas como los desiertos del suroeste de Estados Unidos, pero precisamente las algas verdes microscópicas que viven allí son extraordinariamente tolerantes a la deshidratación. De hecho, después de secarse por completo pueden recuperar su actividad y comenzar a realizar la fotosíntesis en cuestión de segundos con tan solo recibir una sola gota de agua.

Un nuevo estudio que publica 'Proceedings of National Academy of Sciences', arrojan luz sobre la tolerancia a la desecación en las plantas verdes. Estas pequeñas algas (muchas de unas pocas micras de tamaño) viven incrustadas en costras microbióticas del suelo, que son características de las zonas áridas y están formadas por comunidades de bacterias, líquenes, microalgas, hongos e incluso pequeños musgos.

Las investigadoras del Laboratorio de Biología Marina de Massachusetts Elena López Peredo y Zoe Cardón se plantearon la pregunta de cómo son tan resistentes estos microorganismos. Y es que, dadas las intensas sequías y los patrones alterados de precipitación pronosticados a medida que el clima global se calienta, es apremiante comprender las adaptaciones que facilitan la supervivencia de las plantas verdes en ambientes áridos.

Trabajando con dos especies particularmente resistentes de microalgas verdes ('Acutodesmus deserticola' y 'Flechtneria rotunda), Peredo y Cardon estudiaron la regulación ascendente y descendente de la expresión génica durante la desecación, y agregaron una vuelta de tuerca ya que también analizaron la expresión génica en un pariente acuático cercano ('Enallax costatus'), ya que se secó y finalmente murió.

Sorprendentemente, las tres algas, tolerantes a la desecación o no, aumentaron la expresión de grupos de genes conocidos por proteger incluso las plantas de semillas durante la sequía. Pero las algas tolerantes a la desecación también redujeron la expresión de genes que codifican muchos otros procesos celulares básicos, lo que aparentemente frena su metabolismo. El pariente acuático no lo hizo.

La investigación de Peredo y Cardon sugiere que esta nueva perspectiva sobre la tolerancia a la desecación justifica la investigación en plantas verdes en general. La regulación previa de la expresión génica que codifica proteínas protectoras puede ser necesaria pero no suficiente, ya que la regulación negativa de diversos genes metabólicos también puede ser clave para la supervivencia.