Javier Ruiz, sobre la irrupción de DeepSeek en la IA: "Vamos a una guerra fría y nos obligan a escoger bando"

 La irrupción de DeepSeek, el modelo chino de IA, ha provocado un terremoto económico y geopolítico sin precedentes desde la Guerra Fría entre EEUU y la URSS. Como cada semana en 'MoneyTalks', Javier Ruiz explica lo que supone el paso dado por el gigante asiático para el resto de compañías tecnológicas y para el mundo en general.

La llegada de DeepSeek recuerda a lo que supuso el Sputnik en la carrera espacial, cuando en 1957 EEUU creía que controlaba el espacio y aquel satélite ruso se lanzó antes que uno norteamericano. El impacto ha sacudido con fuerza en la Bolsa a Nvidia, el mayor y casi único fabricante de chips del mundo, que perdió en 24 horas tanto dinero como la mitad del PIB de España en un año, la mayor caída de la historia bursátil.

De la carrera espacial a la tecnológica

La carrera ya no es espacial, ni armamentística, es tecnológica. Y EEUU se acaba de dar cuenta de que no va ganando. Ni es el primero ni es el más eficiente. DeepSeek es mejor que ChatGPT, más rápido y además tiene código abierto. Y China lo ha conseguido con los mismos chips de segunda generación, peores, que EEUU le enviaba. Con ellos ha creado un modelo R1 que lo cambia todo y encima abaratando el proceso.

China ha adelantado por la derecha a EEUU con un modelo que ha costado 5,6 millones de dólares, una fracción infinitesimal de lo que gasta OpenAI. En términos económicos, esto significa que todo el mundo puede entrar a jugar con modelos mucho más pequeños y baratos que los de las grandes compañías. Se ha bajado la barrera de entrada de la IA. Y luego está la guinda de la eficiencia energética.

Un nuevo telón de acero tecnológico

ChatGPT puede seguir siendo el modelo principal, pero DeepSeek ya es la aplicación más descargada del momento, y llegarán más jugadores. Pero vamos a tener un problema moral. Vamos hacia una nueva guerra fría, un nuevo telón de acero tecnológico y nos van a obligar a escoger entre dos modelos, el de EEUU o el de China, y ninguno es necesariamente el modelo de la verdad.

El modelo americano tiene un claro sesgo y manipulación a favor de las fuentes y la programación de las que bebe, que son las de la ultraderecha de gente como Elon Musk y el resto de broligarcas de Donald Trump, los mismos que están abogando por devolver el machismo y la testosterona a las empresas. Y al otro lado está el modelo chino, que es capaz de censurar a esa misma inteligencia artificial. Los dos son muy peligrosos.

Europa ahora mismo está descolgada de esa competición, aunque quizás el nuevo paradigma de abaratamiento de costes permita su entrada con un modelo propio, más ético, de valores firmes entre la extrema derecha y el comunismo chino. Esto ahora es más necesario que nunca. Probablemente precisemos otro tipo de inteligencia artificial, con más chequeo humano, fuentes verificables y, en definitiva, más inteligente. Puedes ver la charla completa de 'MoneyTalks' en el vídeo.