Han sido las múltiples ocasiones en las que las personas se han electrocutado por conectar el teléfono en el baño y que por error este caiga dentro de la bañera. De hecho, en diciembre de 2018, Irina Rybnikova, una atleta rusa de 15 años, perdió la vida después de que el teléfono que tenía conectado a la luz cayera al agua.
En febrero del mismo año, otra colegiala rusa de 12 años, Kseniya P, también se electrocutó en el baño. La niña se encontraba escuchando música cuando el teléfono se quedó sin batería. Es entonces cuando enchufó el móvil para cargarlo y este se le cayó al agua, provocando que la joven se electrocutara y muriera.
Esto es debido a que el agua es conductora de electricidad, lo que implica que cualquier aparato electrónico que esté conectado a la luz provoque una serie de accidentes.
Además, según la Clínica Mayo de Estados Unidos, pasar mucho tiempo sentado mirando el teléfono móvil puede ser causa de hemorroides. Además, puede agravar más aún los problemas de las hemorroides, como los síntomas de dolor, picazón, inflamación o sangrado.
Por último, cabe destacar el baño está lleno de bacterias que pueden contaminar tu teléfono móvil y estas no se encuentran exclusivamente en el inodoro. Esto puede hacer que desarrolles enfermedades o infecciones gastrointestinales.
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