Las Dracónidas de este año tienen puntos a favor y puntos en contra. Lo negativo es que la Luna se encontrará en fase creciente, por lo que podrá ocultar los meteoros más visibles. No obstante, diremos a su favor que las estrellas fugaces se verán durante más segundos, porque los meteoros de esta lluvia tienen una media de velocidad de apenas 20 kilómetros por segundo (las Perseidas, por ejemplo, pasan a 70 kilómetros por segundo). Se trata, pues, de una de las lluvias de estrellas más lentas del año.
Cada 6 años y medio, el cometa 21P/Giacobini-Zinner pasa por su perihelio, es decir, el punto más cercano al Sol y cuando la lluvia es más intensa. La última vez que esto pasó fue en 2011, cuando se pudieron observar en Europa más de 600 meteoros por hora. Este año todavía no toca pero, oye, igual nos llevamos una sorpresa.
¿Cómo ver las Dracónidas?
Si finalmente te animas a observar el cielo, te diremos que, antes de nada, mires la previsión meteorológica de tu zona. En este caso, se esperan cielos despejados en Galicia, Madrid, Castilla La-Mancha (especialmente las provincias de Toledo y Guadalajara), Extremadura, Huesca y Las Palmas.
Túmbate boca arriba mirando hacia el noroeste, donde está la Osa Menor. Es por donde pasarán los meteoros.
Huye de la contaminación lumínica. Al caer en fin de semana, esta es una buena excusa para hacer una escapada a lugares donde el otoño se manifiesta en su máxima intensidad. Estos son los mejores sitios para conjugar lluvia de estrellas y naturaleza viva.
Después de las Dracónidas le tocará el turno a las Oriónidas, originadas por fragmentos del famoso cometa Halley. Suelen ser de unos 20 meteoros por hora (muy flojitas) y su máximo este año será el 21 de octubre.