El complicado traslado de un cuadro de Velázquez a la Galería de las Colecciones Reales: imágenes exclusivas

  • Un equipo de Informativos Telecinco ha sido testigo del traslado las obras que formarán parte de la Galería de las Colecciones Reales

  • Entre esas piezas se encuentra el 'Caballo blanco' de Diego Velázquez: el lienzo fue trasladado desde el Palacio Real hasta las Reales Caballerizas

  • Llenar más de 40.000 metros, el nuevo espacio de exhibición, lleva tiempo: poco a poco van llegando las 650 obras esperadas

Un equipo de Informativos Telecinco ha sido testigo del traslado de algunas de las obras que formarán parte de la Galería de las Colecciones Reales, el nuevo museo que esperan en Madrid. Entre esas piezas se encuentra el 'Caballo blanco' de Diego Velázquez, un enorme lienzo que convierte su mudanza en una operación delicada.

Llenar más de 40.000 metros, el nuevo espacio de exhibición, lleva tiempo. Poco a poco van llegando hasta allí las 650 obras esperadas. Desde el Palacio Real se ha trasladado la joya de Velázquez recién restaurada. Desde luego no ha podido abandonar el palacio a galope, sino cabalgando al paso cientos de metros. Su mudanza ha implicado a varios equipos. "De seguridad, de traslado o de registros, que coordinan los movimientos", explica uno de los profesionales implicados.

El 'Caballo blanco' de Velázquez: "A la espera de un jinete, tenemos la incógnita de quién podría ser"

En 1660 apareció en el taller de Velázquez el misterioso 'Caballo blanco'. Los especialistas aseguran que sigue siendo un misterio: "A la espera de un jinete que todavía tenemos la gran incógnita de quién podría ser". Las puertas del Palacio Real son lo suficientemente grandes como para que haya podido atravesarlas el lienzo de más de tres metros de altura. El recorrido de la mudanza se ha estudiado al milímetro.

Un camión de especial altura para el traslado hasta las Reales Caballerizas

El tramo más complicado, las escaleras, donde los profesionales se han enfrentado a 70 escalones estando cargados. En el patio del Palacio Real, con mimo, se ha embalado el cuadro en una caja especial para ponerse en marcha: "Estaba previsto un camión de especial altura". De esta forma, la obra ha llegado a la que será su nueva casa, bastante cerca del lugar que partió. Ahora descansa en las Reales Caballerizas. En verano todos podrán disfrutar del museo.