Maria Dueñas: "No me da miedo envejecer, pero no me hace ninguna gracia"
La nueva novela de la escritora de Puertollano, titulada ‘Por si un día volvemos’, se centra en los pied-noirs españoles
Se trata de una parte de la historia de España poco conocida, que se desarrolló en Argelia
Ha vendido varios millones de libros en todo el mundo tras su debut en 2009 y se han traducido a más de 35 idiomas
Dueñas vuelve a poner letras al pasado colonial. Esta vez centrándose en los pieds-noirs españoles, “gente luchadora, trabajadora, que vivió en la Argelia francesa y tuvo que abandonar aquel mundo cuando en 1962 llegó la independencia”, como explica para Uppers. La novela, titulada ‘Por si un día volvemos’, se centra en tres décadas de la vida de Celia, su protagonista, y promete seguir el camino súper ventas que inició ‘El tiempo entre costuras’. Un éxito inmediato (que siguió con 'Sira') y que le permitió a Dueñas dejar su trabajo como profesora universitaria de filología inglesa en Murcia para dedicarse por entero a la literatura. De aquello hace más de 15 años, varios millones de ejemplares vendidos y traducciones a más de 35 idiomas.
De hecho, empezó a escribir sin tener la idea de cambiar de vida, pero sucedió. Eso sí, la determinación de acabar esa novela que le rondaba durante año fue implacable. Se documentó, leyó, buscó, sintió. Y acabo por abrir un documento word en el ordenador. Ese primer comienzo intuitivo fue terco. "No sabía si iba a encontrar quién me publicase esa novela. Pero tampoco fue sentarse a ver qué sale. Me lo planteé muy en serio, como otros asuntos de mi trabajo académico", explica.
¿Recuerdas el instante exacto en el que pensaste: aquí tengo una nueva novela?
No recuerdo el momento exacto. Pero desde hace muchos años conozco la existencia de los españoles en Argelia y, más concretamente, en la ciudad de Orán, que es donde transcurre la novela.
¿Tienes la entereza y la valentía de tu protagonista Cecilia?
Somos mujeres de vidas y tiempos muy distintos; la existencia de Cecilia es mucho más dura que la mía. Es audaz, resistente, tenaz, lúcida. Tiene un gran carisma, un gran atractivo que va desarrollando a lo largo de los treinta años en los que transcurre la novela. La conocemos siendo una joven pobre e ignorante, y la despedimos siendo una empresaria madura y solvente.
¿Qué crees que pensaría aquella profesora que fuiste si alguien le hubiese dicho hace unos años lo que le esperaba?
Supongo que se sorprendería muchísimo.
¿Echas de menos algo de aquellos días?
Es una etapa de mi vida que resultó muy enriquecedora y gratificante en su momento, pero quedó atraes hace quince años.
¿Sabes que eres el símbolo de una generación a la que le gustaría cambiar de vida en la mediana edad para dedicarse a lo que le apasiona?
¿De verdad? Son sorpresas de la vida...
¿Te pensaste mucho el cambio de vida?
Escribí y publiqué ‘El tiempo entre costuras’ sin tener la menor idea de cuál sería su futuro. Decidí dejar la universidad cuando la buena aceptación de la novela me impidió manejar a la vez las dos facetas profesionales.
¿Te dio miedo?
No, porque pedí una excedencia. Sabía que podría volver atrás, a mi trabajo de siempre, si las cosas no avanzaban bien en la literatura.
¿Qué le dirías a alguien de 50 años en la misma situación que tú estabas?
Nada en concreto, cada cual debe tomar sus propias decisiones en función de las circunstancias de su vida.
¿Está entre tus planes jubilarte?
No, de momento.
¿Cómo te imaginas tu retiro?
Con buena salud, buen tiempo y muchos libros.
¿Te da miedo envejecer, el paso del tiempo sobre el cuerpo y la mente?
Miedo no, porque es ley de vida. Otra cosa es que no me haga ninguna gracia.
Un recordatorio en una frase para tu yo del futuro en 20 años: "María, recuerda que…"
Hay que seguir activa.
