En el blog de la Fundación del Nobel portugués "El cuaderno de Saramago" el escritor comienza con una frase: "El susto fue terrible" para narrar cómo se sintió al enterarse de la gravedad de Mario Benedetti.
"Ángel González se nos fue sin aviso en una fría madrugada de enero. Que ahora Benedetti estuviera en peligro allá en su distante Montevideo" era algo que el autor no se resignaba a aceptar; mucho más cuando no sabía qué hacer desde aquí" apunta.
Hasta que su mujer, Pilar del Río, propuso que, dado que se trata de un gran poeta "nada mejor que arranquemos sus poemas de la inmovilidad de la página y hagamos con ellos una nube de palabras, de sonidos, de música, que atraviesen el Atlántico (las palabras, los sonidos, las música de Benedetti)".
"Y se detenga como una orquesta protectora -añade-, delante de la ventana que está prohibido abrir, acunándole el sueño y haciéndolo sonreír al despertar".
Saramago quiere que los ciudadanos del mundo hagan su contribución personal "juntando poemas de Benedetti a los poemas de Benedetti" para así, aunque "a los médicos algo se les debe", los ciudadanos "también hemos tenido parte en el trabajo. Mario Benedetti está mejor. Leamos entonces un poema suyo", concluye el Nobel, quien ha creado así en su blog "una cadena de poesía por Benedetti".