Cuál es el verdadero origen del número 13 como símbolo de mala suerte

En algunas compañías aéreas optan por evitar este número y en algunos edificios no existe la planta trece en el ascensor
Derramar la sal da mala suerte: de dónde viene esta superstición
MadridEn muchas culturas, el número trece se ha considerado como símbolo de la mala suerte. Históricamente, esto ha estado ligado a la religión, pero con el tiempo ha traspasado a todos los ámbitos y se ha convertido en una tradición de la que no todo el mundo conoce el origen. Tanto se relaciona con los malos augurios que algunas personas incluso evitan nombrarlo y se refieren a este número como el 12 + 1.
En algunas compañías aéreas optan por evitar este número y en algunos edificios no existe la planta trece en el ascensor, optando por darle un nombre alternativo. No hay duda de que para mucha gente este número atrae la mala suerte, pero ¿por qué se considera así?
El origen del número 13 como símbolo de mala suerte
No existe una única explicación sobre el origen de esta superstición, pero el miedo irracional a este número incluso tiene su propio nombre: triscaidecafobia. Para muchas personas, esta tradición de asociar el 13 con la mala suerte puede deberse a una serie de hechos que a lo largo de la historia han tenido relación con este número, ya sea como cantidad o como fecha.
Este número es el que sigue al 12, que se asocia con la integridad, son doce los meses, las horas… y el trece rompe ese equilibrio, esa perfección que se asocia con el anterior. También doce eran los apóstoles de Jesús y con él en la cena llegaron a ser trece. Es precisamente a Judas, quien le traicionó, al que se le atribuye el número 13. Asimismo, según la tradición, a Jesús se le crucificó un viernes 13.
No es el único vínculo de este número con la religión, esta cifra también se asocia al carnero que Abraham debía sacrificar a Dios, por eso se considera un número de la muerte y por ende, de la mala suerte. Según recogen en La Vanguardia, en el Apocalipsis, es en el capítulo trece de la profecía cuando llega el anticristo. Además, en la Cábala judía son 13 los espíritus malignos y en la mitología escandinava, el dios que llegó en decimotercer lugar a una fiesta en el Valhalla fue Loki, considerado un espíritu del mal que engañó para matar al dios Baldur.
En el tarot, la carta número 13 es la que representa a la muerte, que evoca temor e incertidumbre, aunque en muchas ocasiones se interpreta como un cambio y símbolo de transformación. Todos estos hechos, casualidades e interpretaciones juntos bien podrían explicar el porqué de que tanta gente sienta ciertas reticencias hacia este número.
Aunque bien se podría pensar que se han encontrado tantas casualidades y relaciones porque se han buscado, como posible explicación para entender por qué para tantas personas es un número que simboliza la mala suerte. Lo cierto es que no parece haber una sola explicación a la que atribuir la fortuna de este número, pero parece que su mala suerte es una cuestión histórica y común a varias culturas y religiones. Por algo será… ¿o no?