La razón de la demanda se remonta a 2007 cuando Cíntia Mayerle después de preparar las albóndigas para su familia y degustarlas todos juntos fue a guardar el sobrante del tomate utilizado.
Al vaciar el bote descubrió un condón enrollado en el interior de la lata. Cuando la mujer llamó a la empresa fabricante de las salsas y le contó lo ocurrido, esta se limitó a ofrecerle la sustitución del bote contaminado por otro.
Ella llevó a analizar el condón y el informe se lo envió al fabricante, pero la empresa rechazó resolver el asunto amistosamente, tras alegar que no se podía probar que efectivamente el objeto estaba en el interior de la lata al ser abierta y no introducido después.
El asunto saltó de la prensa a los tribunales y ahora la empresa ha tenido que pagar 5.000 dólares por ocasionar "daños morales" a la familia, según publicó el portal 'Globo'.
En su fallo, el juez Joao Gilberto Marroni Vitola definió la situación como grotesca y causante de un profundo disgusto de la familia. Esta, por su parte, alegó que la comida les había provocada náuseas y vómitos.
Durante el juicio, la empresa fabricante alegó que el proceso de producción y envasado es totalmente automatizado.
La acción legal comenzó y ahora la justicia brasileña se ha pronunciado.