A Sia Cooper no le paran las críticas que recibe constantemente por compaginar su maternidad con una vida sana. En su 'Diario de una mamá en forma' comparte consejos para recuperar la figura tras dar a luz. Ha sido precisamente su trabajo por lo que ha sido considerada "mala madre". Por tanto, aprovecha el mismo perfil de Instagram para demostrar su orgullo ante la educación de sus hijos.
Le han llamado "mala madre" por: hacer ejercicio mientras tiene hijos, cuidar su apariencia y salud, beber vino de vez en cuando, dejar que sus hijos usen tecnología, permitir que sus hijos coman azúcar... "No hay una sola manera correcta de ser padre o madre. Lo que funciona para una familia, puede no funcionar para otra", responde tajante. Por eso le lanza un mensaje a "las verdaderas malas madres", que son las que constantemente destrozan a otras madres al juzgarlas.
"Ser madre es lo suficientemente difícil" y si sus actos la convierten en una "mala madre", lo admite orgullosa. Es más, otras madres anónimas comparten pensamientos que no son políticamente correctos como apoyo al argumento de Sia. En esa cuenta está permitido confesar malos comportamientos como madres. Este colectivo también existe en España, reunidas bajo el nombre del Club de las malas madres.
"A veces odio a mi hijo"; "Mi hijo de 2 años tiene miedo de que se abra la puerta del garaje, así que lo abro antes de que se suba al coche solo para poder reírme"; "Mis hijos solían lamer la sal de mis Margaritas". Estas son algunas de los mensajes compartidos por las "malas madres".