El ataque sucedió mientras Diego, la víctima, se bañaba junto a su hermano menor en un río. De pronto, el el cocodrilo mordió al joven en el brazo izquierdo y empezó a arrastrarlo hacia el agua, informa Manila Bulletin.
El hermano corrió hacia donde estaban los padres para alertarles de lo sucedido, y rápidamente llegó Tejada Abdulhasan, el padre, quien le propinó puñetazos y hasta lo llegó a morder en la parte blanda de una de sus patas.
El padre logró que el animal soltara a Diego y desapareció bajo el agua. Bonito final para tan trágico suceso.