"Salté con mis pantalones bajados y me di la vuelta y lo vi". Esto es lo que relata la mujer que fue atacada por una serpiente. Al parecer ella no se fijó en que la serpiente se encontraba en la taza cuando se sentó y este, al ver que ella invadía su espacio, la atacó.
Pese a que la mordedura no era venenosa, la víctima fue llevada a un centro sanitario, tal y como recoge 'Nueva España'. Los expertos insisten en que es importante alertar a los autoridades ante la presencia de estos animales sean del tamaño que sean, debido a que enfrentarse a las serpientes sin conocimiento alguno puede poner en mayor peligro a las personas que se encuentren en el lugar.