El lunes José Luis Rodríguez Zapatero situó el crecimiento de la economía para 2008 por debajo del 2 por ciento y propuso un plan de austeridad con recorte de oferta de empleo público y congelación de los salarios de los altos cargos del Estado. Hoy y tras las peticiones de toda la oposición, el portavoz socialista en el Congreso, José Antonio Alonso, ha anunciado la comparecencia del jefe del Ejecutivo para explicar las últimas medidas el miércoles de la próxima semana.
Pedro Solbres, ministro de economía ha ratificado los datos ofrecidos por Zapatero en el Consejo Económico y Social. No obstante, el titular de Economía ha insistido en que la recuperación de la economía comenzará en el segundo semestre del próximo año.
El ministro de Trabajo, que ha elevado al 11% la tasa de parao para el próximo año, se ha manifestado partidario de no "jubilar por jubilar", sino sólo en los sectores donde se requiera. Con respecto a las pensiones, ha dicho que "están garantizadas", aunque ha precisado que habrá que reflexionar sobre cómo estará la situación dentro de 30 ó 40 años.
Los últimos datos
En mayo el paro creció en 15.000 personas. Se incrementó un 19% desde el mismo mes del año anterior. De hecho fue la primera vez que el desempleo crecía en mayo desde 1996.
La desaceleración económica está mermando el superávit de las cuentas del Estado que, en los cinco primeros meses del año, se redujo el 80 por ciento respecto al mismo periodo de 2007 y sólo sumó 2.722 millones de euros, frente a los 13.592 de un año antes.
El secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, ha atribuido el acusado descenso del superávit a la desaceleración económica, principalmente en lo que afecta al sector inmobiliario, y al aumento de los costes empresariales por el alto precio del crudo.
El presidente del Gobierno tiene previsto explicar en el Congreso de los Diputados las 21 medidas para paliar la crisis que el lunes anunció en el Consejo Económico y Social, y así atender a la petición de la oposición. Entre las inciativas de Zapatero está el recorte de la oferta de empleo público y la congelación de los salarios de los altos cargos del Estado.