Si continúa la fuerte presión en los mercados, España podría tener serios problemas para financiarse. Los analistas hacen una llamada de atención al Gobierno que resulte de las elecciónes del próximo domingo para que adopte cuanto antes medidas de ajuste.
Pero el ataque a los mercados de deuda ha contagiado ya a varios países de la eurozona. Salvo Alemania, el resto de países europeos está sufriendo el acoso de los especuladores.
Aunque el ojo del huracán sigue posado sobre España e Italia, dos grande de la eurozona se suman al club de los afectados por la escalada de las primas de riesgo: Francia y Austria, cuyas primas de riesgo han alcanzado máximos históricos, 190 puntos en el caso francés y 186 en el austriaco.
El cambio en los Gobiernos, además, no va a ser suficiente para que los mercados se serenen y demandan más ajustes para recortar el déficit y poder salir de la crisis.
Algunos expertos consideran que esta nueva oleada de pánico solo la puede parar el Banco Central Europeo con una compra masiva de la deuda problemática.