¿Alguna vez has fantaseado con regentar un pub irlandés con su deliciosa Guinness y su emotiva música tradicional? Hay pocas maneras más auténticas de sumergirse en la cultura local de Irlanda que entrar en una de estas tabernas. Si has estado allí probablemente ya lo sepas, y hasta hayas considerado que trabajar en ese entorno podría ser ideal para dar un giro a tu vida. Pues bien, ahora tienes una oportunidad de ser el propietario uno de estos encantadores establecimientos que tradicionalmente son gestionados durante generaciones por miembros de la misma familia. El único pero es que tienes que apellidarte McLoughlin para optar a ello.

Se trata del Bar McLoughlin, un pequeño pub en la isla Achill, ubicado en la escarpada costa oeste de Irlanda. El pub ha sido administrado por la misma familia durante 155 años, pero ahora su dueño, Joseph 'Josie' McLoughlin, desea pasarle el testigo a alguien después de 43 años al frente del negocio. El problema es que Josie no tiene descendientes que puedan tomar el relevo, pero él desea preservar el vínculo histórico que existe entre el negocio y su apellido.

“Buscar un comprador fuera de la familia y ver que mi nombre se pierde en la historia… me rompería el corazón”, ha declarado en el medio especializado 'Time Out'. Por eso quiere encontrar a alguien que garantice que el nombre siga figurando en puerta del club. Para ese objetivo cuentan con la ayuda de la marca de cerveza Heineken, que ha lanzado una campaña internacional con anuncios y vallas publicitarias en ciudades como Nueva York, Boston, Sídney, Auckland, Buenos Aires y Phan Thiết, que aglutinan a buena parte de los 88 millones de descendientes irlandeses que hay repartidos por todo el mundo.

"Cuando escuchamos la historia de Josie, supimos que teníamos que hacer algo para ayudarle. Los pubs de Irlanda son algo más que lugares donde disfrutar de una copa; son piezas vivas de la historia, lugares de risas, canciones y lazos de parentesco", ha explicado Mark Noble, director de Mercadotecnia de Heineken Irlanda. Para encontrar al nuevo McLoughlin y que este pueda consolidarse en el mercado, la marca está ofreciendo un paquete de sucesión que incluye asesoramiento en inversiones, apoyo empresarial y mentoría.

La búsqueda forma parte de un plan de Heineken más amplio denominado 'Por Amor a los Pubs'. Más del 40% de los taberneros rurales irlandeses afirman estar pensando en jubilarse, pero el 84% no tiene familiares que se hagan cargo de su legado. Proteger y revitalizar estos establecimientos, contribuyendo así a la conservación de una tradición profundamente arraigada en la cultura irlandesa, es el objetivo de Heineken.

"Para quienes anhelan reencontrarse con su herencia irlandesa, esto es más que una inversión. Esto supone una vuelta a casa, la oportunidad de poseer un trozo de Irlanda, de servir una pinta de cerveza a viejos y nuevos amigos, y de mantener vivo el espíritu del pub para las generaciones venideras", concluye Noble.