El último varapalo para Díaz Ferrán ha venido de parte de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA). El martes, la organización decidió retirar la licencia para la venta de billetes de avión del Grupo Marsans por las dificultades que la empresa habría registrado en los dos últimos meses para percibir el pago que la agencia de viajes debe efectuar a mediados de cada mes.
Por ello y para recuperar la licencia, Viajes Marsans deberá presentar ante la IATA avales por un importe de hasta 20 millones de euros.
Pese a ello, el grupo reconoce que sigue vendiendo billetes y ha anunciado que estudia interponer las correspondientes demandas en reparación de los daños y perjuicios ocasionados por "extralimitarse" en sus facultades.
Sin embargo, éste no ha sido el único golpe que han recibido las empresas de Ferrán. En diciembre, se suspendieron las operaciones de la aerolínea Air Comet que posteriormente se declaró en concurso voluntario de acreedores por no poder pagar sus deudas que superarían los 310 millones de euros.
Además, el pasado mes de marzo, el Ministerio de Economía disolvió Seguros Mercurio, del grupo Marsans por su "grave situación patrimonial y de liquidez", que le iba a impedir hacer frente a los compromisos suscritos con sus clientes".
Según informó el departamento, la disolución era "la única alternativa", ya que "los datos de tesorería facilitados por la propia compañía reflejan que, de no procederse a esta actuación del supervisor, la entidad no podría cumplir sus compromisos de pago". EPF