El otoño suele ser sinónimo de fresquito, vaqueros y chaquetas. Sin embargo, parece que todo eso tardará en llegar. A cambio, tenemos días de temperaturas anormalmente altas fruto de ese anticiclón que se ha colocado en el Atlántico de tal manera que hace de barrera de entrada de borrascas y fríos. Junto a él, planea sobre la superficie una masa de aire procedente de África que ha permitido disparar el mercurio.
Se trata de una situación que, tal y como ha asegurado nuestra compañera y meteoróloga televisiva, Rosalía Fernández, durará hasta finales de octubre, cuando "el aire más fresco se cuele desde el norte" y haga que progresivamente "vayan descendiendo las temperaturas en todo el país".
Hasta entonces, hablaremos de máximas por encima de lo normal, superando los 35ºC en varias regiones del cuadrante suroeste peninsular al menos hasta el jueves. A partir de ahí las máximas empezarán a ser algo más frescas que días anteriores, si bien ya a partir del martes el mercurio irá a menos. Sin embargo, eso no quita que vayamos a pasar frío. De hecho, probablemente siga sobrándonos la chaqueta, al menos por el día.
Al fin y al cabo, y tal y como ha reconocido la Agencia Estatal de Meteorología, se prevé que este otoño sea más caluroso de lo normal en general. No sorprenderá, por tanto, que las altas temperaturas sean noticia el resto de la estación de las hojas.