Si te asomas por el Puente de San Martín, en Toledo, ya no vas a poder disfrutar de las maravillosas vistas que dejaba el río Tajo a su paso. Ahora solo verás un río que “pasa muerto por Toledo, [que] es la cloaca del Jarama y [que] tiene un caudal contaminado”, como explica la Alcaldesa del Ayuntamiento de Toledo, Milagros Tolón. Uno de los ríos más importantes de España, y patrimonio turístico, está lleno de una espuma blanca a causa de los residuos que se han derramado durante años procedentes de la Comunidad de Madrid.
Para acabar con esta situación se ha elaborado un Plan de control de vertidos al Tajo: a base de la limpieza de las riberas y de la liberación a otro lugar del agua sin depurar de la zona de los cigarrales, se va a intentar reducir los residuos del Tajo al mínimo. Además, se van a llevar a cabo controles completos en la zona industrial para prevenir la contaminación.
Pero limpiar el fluido no soluciona todo. Este caso podría tratarse de un delito medioambiental. La Junta de Comunidades se va a reunir en los próximos días para valorar este hecho y para denunciarlo a la Fiscalía si fuese necesario.
La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) y el Seprona trabajan paralelamente para descubrir qué sustancia es esa espuma blanca que vemos en las imágenes. Al parecer, todo apunta a que este vertido, en particular, podría no proceder de Madrid, sino de la provincia toledana.