Los planes que llevan tres meses en el cajón se van materializando a medida que avanzamos en la desescalada, pero todavía nos falta una cosa para terminar de disfrutar: el calor. En el norte siguen mirando al cielo cada tarde en busca del sol que solo aparece cuando se le antoja y el termómetro marca unos 17ºC que poco invitan a darse un chapuzón. En el sur, en cambio, cada vez hace más calor. El martes esta tendencia se reafirma: más lluvias para el norte, y más grados para el sur.
Las nubes de evolución –esas que se cargan durante el día y descargan lluvia por la tarde– se van a desarrollar en el Cantábrico, en Pirineos y en general en cualquier zona de montaña del norte por la influencia de una borrasca que ha echado el ancla al oeste Francia –por allí ha dejado 400 l/m2 en dos días, que serían demasiado incluso para otoño–. Además de agua se espera en estas regiones que sople algo de viento.
Mientras tanto, en la mitad sur el cielo despejado será la tónica general y se alcanzarán los 30ºC un puñado de localidades andaluzas, así como en zonas de Murcia y la Comunidad Valenciana. En los archipiélagos también se rozará esa marca. En el resto, nos quedaremos con valores cercanos a los 25ºC, excepto en el norte. En Galicia, las comunidades del Cantábrico y las próximas a áreas de montaña se esperan menos de 20ºC de máxima.
El martes la borrasca que mencionamos avanzará hacia el noreste e irá desapareciendo poco a poco del mapa, pero nos dejará un frente. Atravesará todo el norte peninsular con tormentas a su paso y un desplome de las temperaturas que será pronunciado en Aragón y Cataluña. Las lluvias podrán llegar a zonas de la Comunidad Valenciana.
Como contrapartida, será un día parecido al lunes en regiones del centro y en casi toda la mitad sur, con sol y más de 25ºC generalizados. En Murcia hará hasta 35ºC.