Dos días después de que el juez levantara el secreto del sumario que investiga una supuesta financiación irregular del PP, Bárcenas también ha presentado su dimisión definitiva como tesorero, cargo que a partir de ahora ocupará José Manuel Romay Beccaría, un hombre de confianza del líder del partido, Mariano Rajoy.
Bárcenas era la primera "víctima" de las revelaciones del sumario. En él, la Policía no alberga dudas de que anotaciones como LB que aparecen en la "contabilidad B" de la trama que se investiga corresponden a Luis Bárcenas, quien, supuestamente, recibió 1,3 millones de euros.
Horas después, las nuevas revelaciones del "caso Gürtel" se cobraban la segunda "baja". Jesús Merino anunciaba también que dejaba el PP para, al igual que Bárcenas, no dañar al partido, poder defenderse mejor y demostrar su "absoluta inocencia" de los hechos que se le imputan: haber recibido más de 254.000 euros en comisiones en la trama.
Bárcenas, que no ha dejado su escaño de senador, no acudió esta mañana a la Comisión de Asuntos Iberoamericanos de la Cámara Alta, donde le esperaban numerosos medios de comunicación, que al filo de las doce del mediodía pudieron conocer la noticia de la dimisión del ya ex tesorero del PP.
Una decisión que Bárcenas tomó después de la reunión que ayer por la tarde mantuvo con Rajoy en la sede nacional de la calle Génova, en la que el líder del PP pidió a su todavía tesorero que reflexionara sobre la situación "compleja" y "delicada" en la que se encontraban tanto él como el partido.
Según han explicado fuentes de esta fuerza política, Bárcenas se mostró dispuesto a irse de la organización, pero pidió a Rajoy que el partido no se mostrara "muy duro" con él y reconociera su trabajo, primero como gerente y luego como tesorero.
Una vez comunicada esta mañana su decisión, el senador ha emitido un comunicado en el que asegura que "injustamente" se le imputaban algunos hechos, ante los que mantiene su "absoluta inocencia".
De "dolorosa" ha calificado él mismo su decisión, a la vez que ha lamentado el daño irreparable que se le ha hecho tanto a su familia como a él y ha asegurado sentirse utilizado como un "instrumento" en contra del PP.
Pese a las peticiones de la oposición, Bárcenas mantiene su escaño en la Cámara Alta. Desde hoy, no forma parte de la dirección de su grupo parlamentario, pero podrá mantenerse en él si así lo decide.
Tras conocerse la noticia, Rajoy ha propuesto como nuevo tesorero al gallego Romay Beccaría, ex ministro de Sanidad con el Gobierno del PP y hombre de confianza del líder del partido que se ha sentido "honrado" por su designación.
Rajoy ha roto su silencio y, además de agradecer a Bárcenas su gesto, ha resaltado en Sevilla que ha quedado acreditado que "no había trama de financiación irregular, sino que unas personas se han aprovechado de algunos militantes del partido para hacer lo que no debieran e incumplir manifiestamente la ley".
Ha defendido Rajoy el "muy elevado" nivel de "exigencia" del PP contra la corrupción, un comportamiento que, a su juicio, deberían mostrar también los socialistas.
Precisamente, Rajoy y Romay Beccaría han asistido en Sevilla a una reunión convocada por el presidente de honor del PP José María Aznar, quien ha aprovechado su discurso ante los compañeros de su primera ejecutiva para pedir al partido que "no tolere nunca ni minimice" las conductas corruptas.
Mientras, el instructor en el Tribunal de Justicia de Madrid (TSJM) del "caso Gürtel", Antonio Pedreira, mantiene el secreto de las investigaciones llevadas a cabo sobre aforados de Castilla y León y su relación con la adjudicación de las obras de la variante de Olleros del Alba (León) a la empresa Teconsa.
Según informes policiales del sumario, la empresa Teconsa habría abonado al presunto líder de la trama Gürtel, Francisco Correa, 120.100 euros por dicha adjudicación, que éste habría distribuido entre las personas que hicieron posible la misma.
Entre éstas, la Policía incluía al propio Correa, a Luis Bárcenas -bajo las siglas L o LB- y otras tres personas señaladas por las siglas T.O., G. y J..